La historia parece normal, pero lo cierto es que va a crear un precedente muy importante para acabar con la cultura de la violación, poniendo especial énfasis en que el consentimiento es un pilar fundamental a la hora de mantener relaciones sexuales.
La historia es de la siguiente manera. Chico y chica se encuentran en Tinder. Él es francés, ella suiza. Se gustan y quedan en una primera cita. Las cosas van bien entre ellos y deciden quedar en una segunda cita donde pactan tener sexo con protección. Sin embargo, durante la relación él decide quitarse el preservativo sin hablarlo con ella, que no se da cuenta de la maniobra de su acompañante hasta que terminan. El riesgo de embarazo y de transmisión de enfermedades es más que evidente, por lo que ella decide denunciarle. Los hechos ocurrieron el año pasado y no se conocen los nombres de ninguno de los dos.
Ahora un juez le ha dado la razón a la denunciante. La Corte Criminal de Lausana en Suiza estima que la mujer no habría accedido a tener sexo si las condiciones hubieran sido las que él terminó imponiendo (relaciones sin protección), por lo que el hombre ha sido condenado a 12 meses de prisión. El magistrado considera que lo ocurrido puede considerarse una violación.
El abogado de la víctima ha celebrado la sentencia y ha manifestado que es la primera vez que se produce una condena de este tipo en Suiza. Es de entender que va a crear jurisprudencia y que a partir de este momento se va a perseguir este tipo de actos que suponen riesgos innecesarios para la salud y que además constituyen un delito.