Se prevé que el presidente Donald Trump delinee el viernes próximo sus nuevas políticas en torno a Cuba, con medidas que podrían revertir algunos de los cambios realizados por su predecesor Barack Obama para abrir el comercio y los viajes después de medio siglo de distanciamiento con la isla comunista.
El gobierno de Trump ha analizado los cambios a las políticas, que incluyen la prohibición a realizar negocios con el ejército cubano, además de mantener en su totalidad las relaciones diplomáticas que restauró Obama.
Trump anunciará las nuevas políticas el viernes en Miami, según una persona con conocimiento del plan y que habló bajo condición de anonimato. La Casa Blanca dijo que oficialmente aún no se establece una fecha.
Los cambios en las políticas realizados por Obama generaron una extensa inversión corporativa en la isla, incluso nuevos vuelos comerciales a diario, licencias para operadores de hoteles estadounidenses e inversiones agrícolas por parte de compañías de Estados Unidos. Trump estará bajo presión de legisladores e intereses corporativos para mantener el compromiso de Estados Unidos con La Habana.
El turismo hacia Cuba sigue siendo ilegal bajo las leyes de Estados Unidos, pero se ha permitido bajo muchas circunstancias. Los turistas estadounidenses hacia la isla deben encajar en una de las 12 categorías de justificación para su viaje, que van desde actividades religiosas y educativas que tienen como objetivo poner al viajante en contacto con el pueblo cubano.