Las dos primeras fechas de la Liga Dominicana de Fútbol –LDF-han sido un éxito, sobre todo, en lo que respecta a la región del Cibao y Santiago, específicamente.
Los dos encuentros celebrados en el plano local, Estadio del Cibao Fútbol Club, ubicado en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra –PUCMM-, han resultado de alta calidad competitiva y de emociones a granel, además de haber recibido un notable respaldo de la fanaticada.
Lo mismo podría decirse, según informes, de los partidos escenificados en otras localidades de la región, tales como Moca y Puerto Plata, entre otros.
Es decir, todo hace indicar de que este proyecto va camino a convertirse en una realidad, si se toma en cuenta el impacto que ha registrado hasta ahora y la sólida estructura en que ha sido montado, tanto en lo económico como en lo organizativo.
No obstante, sería conveniente esperar, para determinar si todo lo que ha ocurrido, no representa una simple expresión de la euforía que ha causado el lanzamiento de la liga en estos primeros días, una fiebre momentánea o, si ciertamente, este certamen “llegó para quedarse” que, lógicamente, sería lo ideal. Por lo pronto, los indicios son muy buenos.
Indetenible…
Desde hace un buen tiempo los europeos, muy en especial los pugilistas provenientes de Europa del Este, en este caso de Rusia, han dominado las divisiones grandes en el boxeo.
Y en ese orden, los hermanos Klitschko, Vitali y Wladimir, quienes han impuesto una dictadura en los pesados –aunque el primero ya está retirado- se constituyen en el mejor ejemplo al respecto.
Ahora la categoría de los semicompletos -175 libras- está siendo “arrasada” por un nuevo fenómeno en este casillero: Su nombre Sergey Kovalev, quien lleva un paso indetenible en este casillero y también viene de Rusia, pese a que reside en Los Angeles.
Se trata de un pugilista de 31 años de edad que todavía no conoce la derrota en 28 salidas, con 27 triunfos, 24 por nocaut y un empate. Es el actual monarca unificado de la división, con tres coronas en su poder: la de la Asociación Mundial de Boxeo –AMB-, de la Federación Internacional de Boxeo –FIB- y la Organización Mundial de Boxeo –OMB-.
Como lo ven, Kovalev apunta a convertirse en campeón absoluto de este peso. Sólo le falta la diadema del Consejo Mundial de Boxeo –CMB-, que está en poder del haitiano-canadiense Adonis Stevenson, quien no ha querido enfrentarlo, aún cuando se les han hecho varias ofertas en ese sentido.
La más reciente víctima de Kovalev lo fue, precisamente, otro haitiano-canadiense: Jean Pascal, un exrey de este peso, quien cayó por nocaut en el octavo asalto.
El combate fue celebrado el pasado sábado, en Montreal, Canadá, y si bien Pascal fue un digno rival y ofreció fiera resistencia, no hay dudas de que Kovalev fue superior en la mayor parte del pleito que terminó al minuto y tres segundos de la vuelta citada cuando el referí, el boricua Luis Pabón, detuvo la contienda.
Kovalev venía de derrotar en noviembre pasado, a la leyenda norteamericana Bernard Hopkins, a quien no pudo noquear, pero se llevó una clara decisión en 12 vueltas.
A juzgar por las demostraciones que ha ofrecido, por el potencial que tiene, resulta obvio que Kovalev es el mejor de las 175 libras hoy día. Si acaso pudiese faltarle una prueba para comprobarlo, ese es Adonis Stevenson. Este último, empero, rehuye enfrentarlo. De todas formas, tarde o temprano tendrán que encontrarse en un ring oficial de pelea ,porque Kovalev es ya retador oficial de Stevenson. Entonces, se habrá de confirmar el concepto ya generalizado de que, el ruso es el mejor semipesado del momento. Ya veremos. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES: A propósito de boxeo, es prudente señalar que, en 1968, Carlos –Teo-Cruz, dio la primera corona mundial a la República Dominicana, tras vencer por puntos al entonces campeón y favorito, el boricua Carlos Ortiz. En la ocasión, Cruz ganó el trono de los ligeros -135 libras-. ¡Suena la campana! ¡Climmp!