Santo Domingo, D. N., 3 de diciembre del 2013.- La Alianza Dominicana Contra la Corrupción, ADOCCO, atribuyo a la impunidad que reina en la República Dominicana el descenso experimentado en el índice de percepción de la corrupción ofrecido hoy por la organización internacional Transparencia Internacional, a juicio de institución que lucha contra la corrupción en el país, la falta de sanciones ejemplarizantes, producto de la voluntad política de los responsables del manejo de la cosa pública, acompañado de la falta de un régimen de consecuencias efectivo nos colocaran en los lugares preponderantes de los estados más corruptos del mundo.
Para ADOCCO, esa posición evidencia que en el gobierno no hay voluntad política para combatir la corrupción administrativa en vista de que la percepción se alimenta de la realidad que vive la población cada día por los sonados escándalos de irregularidades cometidas por los responsables de aplicar de manera correcta y efectivas las normativas que procuraran la transparencia y el buen gobierno, como la Ley 340-06 sobre Compras y Contrataciones de Obras, Bienes y Servicios, conjuntamente con la Ley de Libre Acceso a la Información Publica No. 200-04.
El Coordinador General lamento que la República Dominicana no fuera capaz de por lo menos mantener en lugar del Índice de Percepción de la Corrupción del 2012, dado a conocer por Transparencia Internacional que le concedió el puesto 32, por encima de países que en esta ocasión la superan, el vocero de la entidad Julio Cesar De la Rosa Tiburcio, dijo que para el próximo año el país caerá mas bajo por su falta de interés para el montaje del Foro Centroamericano y República Dominicana por la Transparencia, cuya sede para este año era la República Dominicana, después de los exitosos montajes en el Salvador, Costa Rica y Honduras, como resultado del compromiso del país con la Convención Interamericana de Lucha Contra la Corrupción de la cual es signataria.
Para la entidad de la sociedad civil lo más preocupante de esto es que la Republica Dominicana se aleja cada día más de los beneficios de la cuenta del milenio que condiciona a los países de América Central y la Republica Dominicana a que deben desarrollar acciones para combatir la corrupción, por lo que se han dejado de percibir importantes recursos que contribuirían con el desarrollo nacional.