El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, quien es investigado por presunta asociación ilícita relacionada con el escándalo de supuestos sobornos de la firma brasileña Odebrecht, aseguró hoy que no escapará y pidió públicamente que la Fiscalía exhiba las pruebas en su contra.
Así lo dijo en su cuenta de Twitter poco después de que el fiscal general del Estado, Carlos Baca, solicitara a un juez de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) la prisión preventiva en su contra durante una audiencia de revisión de medidas cautelares, celebrada hoy en Quito.
“No se preocupen, no tienen que buscarme, estoy donde siempre. No voy a escapar. Los inocentes jamás huimos”, escribió Glas, a quien el presidente del país, Lenín Moreno, retiró sus responsabilidades en agosto poco después de que saliera en público contra su gestión.
Y añadió: “Pido públicamente que el Fiscal exhiba ante el país las pruebas que tiene en mi contra”.
El vicepresidente apuntó que espera que su “sacrificio sirva para desenmascarar a los traidores a la Revolución (ciudadana) y a la Patria”.
Lo dijo después de que se pidiera la prisión preventiva en su contra “por encontrarse nuevos elementos de convicción en investigación por asociación ilícita”, según la Fiscalía.
El vicepresidente apuntó que “según todos los juristas, incluidos los más feroces opositores, el pedido del Fiscal para que se sustituyan las medidas cautelares es una aberración jurídica”.
“¿Qué más prueba quieren de que este proceso no es jurídico sino político?”, se preguntó Glas.
En un comunicado enlazado en Twitter, Glas, quien fue también vicepresidente de Rafael Correa, se dirige al actual jefe de Estado: “Presidente Moreno, parece que sus subalternos no lo han escuchado. Usted dice que no interferirá en las otras funciones del Estado, pero faltó explicar a sus colaboradores que ellos tampoco pueden hacerlo”.
“Este ha sido un proceso plagado de irregularidades. No se ha respetado el principio de presunción de inocencia y se me ha dejado en indefensión al negarme información fundamental para mi defensa”, añadió.
En su opinión, esto no es solo contra él sino que “es parte de un plan organizado para destruir a la Revolución Ciudadana y a Rafael Correa”, dijo en referencia al proyecto político que instauró al llegar al poder, en 2007, el movimiento oficialista Alianza País, del que también forma parte Moreno.
De su lado, Correa, quien vive en Bélgica -de donde es oriunda su esposa-, dijo hoy en Twitter que respeta la Justicia, pero “no es entendible lo que está haciendo Fiscalía”.
“¿Prisión preventiva por “nuevos elementos de convicción”?, se preguntó.