SAN JOSE:COSTA RICA: El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reconoció ayer viernes en Costa Rica la responsabilidad de su país en los problemas de Centroamérica, especialmente en su lucha contra las drogas, explicó que también su nación sufre las consecuencias de ese consumo y sostuvo que no está interesado en “militarizar la lucha contra el narcotráfico” sino en una estrategia integral.
Por su parte, Chinchilla calificó el tema de la seguridad como una “preocupación fundamental”.
“Reconocemos que tenemos responsabilidad en el problema de las drogas, que parte del problema viene del consumo y vamos a seguir dedicándonos de manera integral a combatirlo”, dijo Obama.
Los presidentes centroamericanos, especialmente los de Honduras, El Salvador y Guatemala, han dicho en repetidas ocasiones que la violencia que sufren sus países, el llamado “triángulo norte” de Centroamérica, se deben a su ubicación geográfica y al consumo de drogas en los Estados Unidos. El presidente salvadoreño Mauricio Funes dijo recientemente en Washington que “el problema del narcotráfico y el menudeo en nuestros países se reduciría significativamente si dejase de consumirse esa cocaína en Estados Unidos”.
Obama señaló que desde que ejerce el cargo “hemos gastado 30,000 millones de dólares en reducir la demanda de droga” y, pese a que “vemos el impacto”, se trata de “un gran mercado y el progreso es más lento de lo que nos gustaría”.
El mandatario habló en una conferencia de prensa conjunta con la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla.
El presidente de Estados Unidos, que defiende en su viaje a Centroamérica un enfoque integral y no sólo represivo en la lucha contra las drogas, explicó que “el narcotráfico sucede cuando un país es vulnerable a la pobreza, y con iniciativas como la educación se mejorará la situación”.
Obama añadió que “cuanto más fuerte sea la economía de un país y sus instituciones para quienes buscan carreras legítimas, menos poder tendrán los narcotraficantes”.
“Si tenemos una policía eficaz, cooperación y reforzamos la capacitación en Centroamérica, podemos progresar”, dijo Obama en la conferencia de prensa junto a Chinchilla.
Tras señalar que el problema del narcotráfico “es un problema común y sólo lo resolveremos trabajando juntos”, el mandatario estadounidense acotó que “es muy importante que las relaciones bilaterales no se definan sólo por este tema y perdemos todas las demás oportunidades que tenemos como países”.
“Tenemos que admitir que el tema del crimen organizado pesa con crudeza sobre la integridad de nuestras naciones”, dijo Chinchilla en su discurso junto al presidente estadounidense. “No es través de la guerra que derrotaremos este mal. Hay que tomarse muy en serio los mecanismos que prevengan la entrada de bandas criminales en el país”, agregó.