Mucho se ha discutido acerca de la confusión que provoca que Tesla use el concepto ‘Autopilot‘ para el sistema de asistencia al volante de sus coches eléctricos. Esto por supuesto ha ocasionado todo tipo de malas interpretaciones, que incluso han derivado en accidentes e investigaciones, donde se le ha ‘recomendado’ a la compañía el cambio de nombre a esta característica.
A pesar de esto, hay gente que ha puesto a prueba al Autopilot de Tesla en diversas situaciones, mostrando una interesante capacidad de respuesta donde incluso ha sido capaz de anticiparse a accidentes. Hoy gracias al vídeo de un usuario de un Tesla Model S, podemos ver el comportamiento de esta función bajo una situación extrema de nieve en la noche.
Los radares son la clave
A pesar de que en Tesla han sido muy claros de que la función Autopilot está en fase beta, y que no se recomienda su uso en condiciones meteorológicas adversas, algunos usuarios han decidido conocer por su cuenta las capacidades de estos coches, donde sorpresivamente ha habido buenos resultados.
En el siguiente vídeo veremos como un Tesla Model S con Autopilot activado se conduce de forma perfecta sobre una carretera cubierta de nieve, donde las líneas del carril no se perciben y no hay un coche ‘líder’ que le diga al vehículo cuál es el camino a seguir. Como sabemos, el Autopilot se basa en diversas variantes que recibe por medio de cámaras, sensores y radar, de ahí que su funcionamiento se pueda apoyar en mayor medida de uno u otro sistema.
Una pieza clave para el funcionamiento del Autopilot son las líneas de los carriles, pero como Tesla sabe que existen carreteras que no cuentan con ellas, o bien, presentan algún desgaste. En las recientes actualizaciones de sus vehículos han mejorado la lectura de las calles, y en el vídeo vimos como el autosteer mantiene el coche en el carril a pesar de que no detecta ningún carril.
En el tablero podemos ver como el coche se apoya en el radar para detectar la acera como indicador de carril, donde al parecer no hay intervención de la cámara frontal ni del sistema de procesamiento de imágenes “Tesla Vision”. Durante el trayecto en ningún momento el coche sufre ‘confusion’ o emite la alerta de “Take Control”, lo que nos habla de la implementación de nuevas herramientas dentro del coche.
La versión de Autopilot que vemos en el vídeo es el Firmware 8 release 2.42.40, lo que significa que el coche se esta apoyando en los mapas de alta resolución que está construyendo Tesla a través de todos sus vehículos en calle. Todo esto ayuda a que el coche se pueda apoyar en los datos que recoge el GPS y la unidad de medición de inercia (IMU), que se vuelven herramientas esenciales cuando los sistemas del coche no alcanzan a “ver” todo el entorno.
Ahora el siguiente paso será conocer la respuesta de los coches cuando integren el llamado ‘Autopilot 2.0’, que en teoría hará que los vehículos puedan alcanzar el nivel de autonomía 4 o 5, que sería un logro muy importante para Tesla.