Por su parte, los navíos israelíes dispararon más de 100 proyectiles sobre la costa de Ciudad de Gaza y el norte de la Franja, según el portavoz. Los equipos de rescate no podían trabajar en la zona debido al intenso fuego, señaló.
Ashraf al-Kidra, funcionario palestino de salud en Gaza, dijo que las quince víctimas se encontraban entre cientos de personas que trataban de protegerse en la escuela del intenso tiroteo en la zona. Al menos 150 personas sufrieron heridas.
El incidente del jueves representa la cuarta ocasión en que alguna instalación de Naciones Unidas es alcanzada por fuego producido por los enfrentamientos entre Israel y milicianos palestinos en Gaza, que es gobernada por el grupo islámico Hamas.
El jueves la Franja de Gaza fue escenario de ataques con tanques y aviones israelíes, mientras los milicianos de Hamas se aferraban a su demanda de que Egipto e Israel levanten su bloqueo, ante los esfuerzos de Estados Unidos por mediar en un alto el fuego.
Seis miembros de una familia y un bebé de 18 meses murieron cuando una bomba israelí cayó en el campo de refugiados de Jebaliya en las primeras horas de la mañana, dijeron funcionarios policiales y de salud en Gaza.
Otros 20 resultaron heridos, y los socorristas removían los escombros en busca de sobrevivientes. Un ataque a la población de Abassan, en el sur de la Franja, matró a cinco miembros de otra familia, dijo el funcionario de salud Ashraf al-Kidra. Abassan es una localidad vecina de Jan Yunis, una zona donde se produjeron intensos combates el miércoles.
En los 16 días de combates han muerto 736 palestinos, en su mayoría civiles, según autoridades sanitarias palestinas. Israel ha perdido 32 soldados, todos desde el 17 de julio, cuando amplió su campaña aérea con una operación por tierra dirigida a acabar con el fuego de cohetes de Gaza y destruir una sofisticada red de túneles transfronterizos. También han muerto dos civiles israelíes y un trabajador tailandés en Israel.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no hizo ninguna referencia a los esfuerzos por lograr u alto el fuego en una comparecencia durante la visita del ministro británico de Exteriores, Philip Hammond, e insistió en su determinación en neutralizar las amenazas planteadas por cohetes y túneles. Más de 2.000 cohetes se han disparado a Israel desde Gaza desde el 8 de julio, y el ejército de Israelí dijo haber descubierto más de 30 túneles entre ambos territorios, algunos de los cuales ha empleado Hamas para realizar ataques.
“Comenzamos esta operación para devolver la paz y la tranquilidad a Israel”, dijo Netanyahu en Jerusalén. “Y las devolveremos”.
Había reportes de fuertes combates a lo largo de la frontera en el centro de Gaza, según el portavoz de la policía del enclave Ayman Batniyi. Los proyectiles de los tanques israelíes llegaron a zonas de los campamentos de refugiados de Bureyi y Magazi. No había noticias inmediatas de lesiones.
También se produjeron enfrentamientos entre combatientes palestinos y tropas israelíes en la localidad norteña de Beit Lahiya, y el sonido de las explosiones se oía en toda la ciudad, dijo Batniyi.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, voló el miércoles a la región en un avión del ejército, pese a la prohibición impuesta el día anterior por la Administración Federal de Aviación (FAA, en sus siglas en inglés) a los vuelos estadounidenses al aeropuerto de Ben Gurion, debido al fuego de cohetes de Hamas.
La FAA retiró su veto justo antes de la medianoche, pero las aerolíneas europeas han extendido sus cancelaciones hasta el jueves. “Desde luego hemos dado pasos hacia delante”, dijo Kerry en Jerusalén el miércoles, sin entrar en detalles. “Aún hay trabajo que hacer”.
Subrayando el calibre del reto al que se enfrenta el máximo diplomático estadounidense, el líder de Hamas insistió en que los milicianos islámicos no cederán hasta que se cumpla su principal demanda, la suspensión del bloqueo de fronteras impuesto por Israel y Egipto sobre la Franja de Gaza.
“Cuando se trata del equilibro de poder en esta crisis entre nosotros e Israel, ellos son los ejecutores, los agresores, los ocupantes, los colonos, y nosotros somos los auténticos dueños de la tierra”, afirmó Jaled Masal en un discurso emitido por televisión desde su hogar en el exilio en Doha, Qatar. “No aceptaremos nada más que el final del asedio”.
Israel impuso un bloqueo en 2006 después de que Hamas y otros milicianos capturasen a un soldado israelí en una mortal incursión transfronteriza. Tel Aviv estrechó el control en 2007 después de que Hamas tomase el poder del enclave de manos de las fuerzas leales al presidente palestino Mahmud Abás, respaldado por Occidente. Algunas de las restricciones se han suavizado en los últimos años.
Egipto estrechó sus propios controles el año pasado tras la caída de un gobierno próximo a Hamas en El Cairo, y ha destruido muchos de los túneles de contrabando entre ambos países que sostenían la economía de Gaza, y que Hamas también utilizaba para introducir armas.