Tokio, 11 may (EFE).- Un estudio elaborado por un equipo científico adscrito al Ministerio japonés de Salud ha concluido que las mujeres que tienen un trabajo a tiempo parcial duplican el riesgo de sufrir un parto prematuro durante el embarazo.
El estudio, realizado entre 2008 y 2011 en 11 centros hospitalarios del archipiélago, analizó los partos de 1.325 mujeres japonesas y concluyó que aquellas con un trabajo a tiempo parcial tienen 2,5 veces más posibilidades de sufrir un parto prematuro que las que trabajan a jornada completa o son amas de casa.
Según el informe, publicado hoy por el diario nipón Asahi, el incremento del riesgo de parto prematuro podría relacionarse con las condiciones de este tipo de empleos, muchos de cara al público, que requieren ejercicio físico y se enmarcan en el sector servicios.
Además, en este tipo de empleos es más complicado solicitar días de descanso, con lo que las embarazadas tienden a mantenerse en su puesto a pesar de mostrar indicios que impliquen la posibilidad de sufrir un parto prematuro, detalló el estudio.
En este sentido, de las 1.325 mujeres que participaron en el estudio, 573 eran amas de casa, 560 trabajadoras a tiempo completo y 192 a tiempo parcial.
Del total, el 7,5 por ciento sufrieron partos prematuros, definidos como aquellos que tienen lugar tres o más semanas antes de la fecha designada para el nacimiento.
Además, los partos prematuros se produjeron en un 12,5 por ciento de las mujeres con trabajos a tiempo parcial, el doble de las empleadas a tiempo completo (un 6,6 por ciento) y de las amas de casa (el 6,5 por ciento).
Según las estadísticas del Ministerio nipón de Sanidad, en 2011 el 5,7 por ciento de los alumbramientos fueron partos prematuros en Japón, lo que representa un incremento de cerca del 40 por ciento durante los últimos 30 años.
Midori Ito, representante del Centro nipón de Acción para las Mujeres Trabajadoras, detalló al diario que muchos de estos trabajos temporales son empleos que requieren a las embarazadas largas horas de pie, algo que no beneficia a su estado.
“Para poder confirmar el riesgo de parto prematuro se necesita estudiar al detalle las condiciones de los trabajos, el ambiente laboral y la cantidad de días que cada una de las mujeres puede tomar”, sugirió Ito.
Una mujer embarazada se somete a una ecografía. EFE/Archivo