Un grupo de defensa de los animales informó que se propone llevar a África por vía aérea a 33 leones rescatados de circos de Perú y Colombia, los cuales serán recogidos esta misma semana en Bogotá y Lima si logra recaudar los fondos necesarios para el viaje.
Según un comunicado de la oficina en Estados Unidos de Animal Defenders International (ADI, por su sigla en inglés), los felinos, entre ellos uno casi ciego, otro sin un ojo, algunos con dientes rotos y todos con sus garras mutiladas, serán llevados a la reserva privada Emoya Big Cat, en la provincia de Limpopo (Sudáfrica).
“Estos leones han soportado un infierno en la tierra y ahora están por volver a casa, al paraíso”, expresó hoy en un comunicado Jan Creamer, presidente de ADI. Para sufragar la operación, que ha sido considerada una de las mayores de este tipo, ADI ha abierto una campaña de donaciones por la web GreaterGood.com.
Sin informar de la suma total que necesita, la organización con sede central en el Reino Unido indicó que ya cuenta con más de las dos terceras partes del coste de los kilómetros que se requieren para devolver los leones a África.
Si consiguen el dinero, nueve de los leones serán recogidos la madrugada del próximo jueves en Bogotá (Colombia) por un avión de carga, para salir rumbo a Lima (Perú) donde serán embarcados los otros 24, para un viaje de más de 16 horas a Johannesburgo (Sudáfrica), a donde llegarán el viernes.
Los Gobiernos de Perú y Colombia prohibieron, en 2011 y 2013, respectivamente, el usos de animales silvestres en circos. En enero pasado, ambos países aprobaron además sendas leyes que reconocen los animales domésticos y silvestres como “seres que sienten” y establecen normas para su resguardo.
ADI explicó que la mejor opción para la recuperación de estos leones es África, pues son originarios de ese continente, y señaló que “desafortunadamente” no existen reservas apropiadas para esta especie en Latinoamérica.
“Los leones están regresando a donde pertenecen, al sol africano, cielos nocturnos de África, selva africana y los sonidos, las nubes, las tormentas de verano, grandes recintos en un entorno natural donde se puede recordar lo que son”, manifestó Savannah Heuser, fundadora del santuario en Emoya Big Cat.
Mientras en Colombia los nueve leones fueron entregados voluntariamente por los circos, en Perú fueron rescatados los otros 24 en operativos policiales, en precarias condiciones, precisó ADI.