El del ridesharing es uno de los sectores más prometedores para la inteligencia artificial. Así lo entiende Uber, que está preparando un nuevo laboratorio central de IA que se establecerá en la sede de la compañía en San Francisco. El núcleo de este laboratorio será Geometric Intelligence, una startup fundada por investigadores académicos, cuya adquisición ha anunciado Uber hoy.
© Juan Miguel Revilla, ITespresso.es
El equipo de Geometric Intelligence incluye al científico cognitivo de la Universidad de Nueva York, Gary Marcus, al profesor de aprendizaje de Cambridge, Zoubin Ghahramani, al profesor de ciencia de la Universidad Central de Florida, Kenneth Stanley, y al doctorado en neurolingüística Douglas Bemis. Su personal, formado por 15 personas, incluye a académicos de alto perfil expertos en datos e inteligencia artificial. Todos mantendrán sus asociaciones profesionales con sus instituciones académicas como parte del acuerdo, informa TechCrunch.
El enfoque de la investigación de Geometric Intelligence hasta la fecha ha sido resolver el problema de cómo hacer que los sistemas de inteligencia artificial puedan reconocer escenarios utilizando conjuntos de datos mucho más pequeños de los que normalmente se requieren.
Desde el punto de vista del nuevo equipo de Uber, que pretende hacer sistemas inteligentes con entradas de datos más limitadas, el conocimiento de la startup podría ser de gran ayuda para mejorar la eficacia de los productos de Uber que no tienen un conjunto de datos sufientemente grande.
La compañía de ridesharing lleva tiempo trabajando en el aprendizaje automático a través de su equipo de investigación en Pittsburgh, que está enfocado específicamente en la resolución de problemas relacionados con la conducción autónoma. Este nuevo equipo estudiará más ampliamente las aplicaciones de la inteligencia artificial, enfocado en una extensa gama de aplicaciones potenciales, incluyendo aspectos como la gestión de rutas. Esto es también señal de que Uber ha tomado ejemplo de gigantes tecnológicos como Google, Apple y Microsoft, cuyos intereses van más allá de un solo campo.
Jeff Holden, CPO de Uber, señaló que independientemente del eje de los negocios de la empresa, hay un desafío común en “negociar el mundo real”, que representa un “problema de inteligencia de alto orden”.