Fernando Gonzalo
Los habitantes de Nueva York que esta semana paseen por Manhattan o por Brooklyn corren el riesgo de ver una imagen que puede dejarles traumatizados de por vida. Bueno, quizá sea exagerar un poco, pero nadie puede negar que la estampa es cuando menos llamativa.
Lo que pueden encontrarse en su tranquilo paseo es nada menos que una proyección de varios metros de altura en la que se ve Donald Trump de una manera insólita: desnudo, embarazado y haciendo la ‘cucharita’ con el mismísimo Vladimir Putin.
Por sorprendente que parezca no se trata de una acción de guerrilla de algún colectivo anti Trump, sino de una campaña de publicidad de una empresa de dating. Concretamente de una llamada Hater, que ha adquirido repercusión mundial por esta iniciativa.
Esta app busca emparejar a personas precisamente por las cosas que declaran odiar, cumpliendo así el dicho de que los polos apuestos se atraen. Y para ello no han podido elegir mejores ‘prescriptores’ que los presidentes de EEUU y de Rusia, dos figuras que históricamente se han odiado pero que en el caso de Trump y Putin parece no ser así.
La ilustración se proyectó en la fachada de tres edificios de Nueva York y no tardó en hacerse viral, gracias a las publicaciones que los transeúntes compartieron al encontrarse con la poderosa imagen.
Desde la compañía afirman que lo único que buscan con esta campaña es que la gente pase un buen rato, ya que creen firmemente que el humor puede convertir el odio en amor. Habrá que ver si Trump piensa lo mismo al respecto…