El Gobierno del presiente Donald Trump podrá interferir en el uso de la marihuana que decidan los diferentes estados, lo que amenaza la ola de legalización y despenalización que viene registrándose en todo el país.
En una iniciativa que enfría el optimismo de los defensores del uso medicinal y recreativo de la marihuana, el Gobierno de Trump tumbó hoy una norma aprobada por el expresidente Barack Obama que impedía la interferencia federal en las decisiones de los estados respecto a la relajación de las leyes contra esta droga.