El presidente de Bolivia, Evo Morales, reposará 11 días más en la ciudad central de Cochabamba antes de retomar su agenda en actos públicos, tras la cirugía de la laringe que le fue realizada en Cuba, aunque seguirá activo en las redes sociales opinando sobre la coyuntura internacional.
La ministra de Comunicación, Gisela López, afirmó ayer a los medios que por recomendaciones médicas el gobernante debe “mantener un reposo relativo hasta el próximo 17 del mes en curso, cuando él va a retomar su agenda pública en sus actividades rutinarias”.
No obstante, López apuntó que, como se ha vuelto a ver, el mandatario sigue activo en Twitter “y no baja la guardia” para hacer conocer sus posición sobre la actualidad política internacional.
Desde su vivienda en Cochabamba donde se recupera, Morales envió ayer un mensaje de felicitaciones a su colega, amigo y aliado de Ecuador, Rafael Correa, por su cumpleaños 53, y agradeció la “solidaridad, bendiciones, ritos, oraciones” que ha recibido a propósito de la operación a la que fue sometido en La Habana.
En la intervención, los médicos cubanos le extirparon una tumoración benigna en la cuerda vocal del lado izquierdo, que le provocaba una ronquera desde hace varios meses.
Las señales de la ronquera empezaron a notarse en enero pasado, cuando Morales hizo un largo discurso para conmemorar sus once años en el poder y luego se agudizaron por sus prolongadas intervenciones en actos públicos en diferentes regiones y climas del país.
El nódulo le fue descubierto en marzo en Cuba tras ser atendido de urgencia por una disfonía, sinusitis y dolores de abdomen.
Dirigentes oficialistas pidieron a Morales cumplir con la exigencia médica de guardar silencio o hablar muy poco y en tono bajo para ayudar a la recuperación, algo que antes de la cirugía era difícil de imaginar, dada su costumbre de hacer muchos discursos cada día.