El Ministerio de Relaciones Exteriores informó que este sábado serán trasladados al país los restos del dominicano Miguel Payano, fallecido en el terremoto en Ecuador.
Igualmente, serán traídos otros seis criollos residentes en ese país que perdieron sus casas y otras pertenencias durante este fenómeno natural, y decidieron retornar a su patria.
El portavozy director de Comunicaciones de la Cancillería, Miguel Medina, manifestó que los dominicanos y el cadáver serán retornados en el avión que trasladará a la brigada humanitaria enviada por el gobierno dominicano a Ecuador y que estuvo apoyando las tareas de rescate y asistencia tras el terremoto.
Medina expresó que el cadáver de Payano fue cremado y tan pronto llegue a territorio nacional será entregados a sus familiares.
Reiteró que Payano, de 49 años, ha sido el único dominicano que haperecido en la tragedia, quien era oriundo de Cotuí, provincia Sánchez Ramírez.
Expuso que tanto los gastos del servicio funerario, como los relativos a su traslado fueron cubiertos por el Ministerio de Relaciones Exteriores, por instrucciones del presidente Danilo Medina, al canciller Andrés Navarro.
Criollos que decidieron retornar
Entre los dominicanos que retornarán de Ecuador se encuentra la familia oriunda de San Pedro Macorís integrada por Yoel Hidalgo de la Cruz, su esposa Aleida Sánchez y dos niñas menores de edad, residentes en Manta, Ecuador, cuya casa se derrumbó.
La Cancillería señaló que esta familia fue trasladada a Guayaquil y alojada en un hotel, por gestiones de la embajada y el consulado dominicanos en esa localidad.
Indicó que también retornarán Jacqueline Concepción De Oleo, del Distrito Nacional, y José Odalis Beato Ortiz, de Jarabacoa, quienes han sido asistidos por las autoridades diplomáticas dominicanas en Ecuador en coordinación con el Departamento de Protección de los Dominicanos en el Exterior.
Enfatizó que los diplomáticos han estado en contacto permanente con las autoridades ecuatorianas y as familias dominicanas residentes en Guayaquil, Santo Domingo, Tungurahua, Ibarra y Quito, zonas donde el fenómeno natural afectó con mayor fuerza para brindar la asistencia debida.
