Cómo un hombre trabajador y sin conflictos describieron al gerente de una estación de combustible que resultó muerto anteayer durante un asalto, en ese establecimiento, ubicado en la calle Pepillo Salcedo con San Martín en el Ensanche La Fe.
Varios comerciantes de la zona consultados por el Listín Diario dijeron que Santiago Polanco, de 51 años de edad era una persona de trabajo que solía madrugar y compartir con los empleados de ese negocio.
Elvis Mejía, quien trabaja en un colmado cercano, lo describió como alguien agradable y a quien conoció desde hace siete años, justo el tiempo que tiene laborando en ese negocio.
“Cuando el no estaba en la oficina siempre se veía afuera relajando con los muchachos (bomberos)”, destacó Mejía.
El joven contó que cuando el panadero llevaba el pan a las 7:00 de la mañana a esa bodega, Santiago quien también era conocido como “Francis”, ya estaba en la gasolinera.
Asimismo, un mecánico de la zona identificado como “Carlos”, comentó que no tenía problema con ninguna persona y “lo más que te puedo decir es que era un amor, tranquilo y amable”.
Además, dijo que aunque esa tragedia ocurrió a las 4:00 de la tarde, los uniformados tardaron para llegar a la estación de combustible, así como la ambulancia del 911.
En ese sentido, dijo que varios empleados decidieron trasladar por su propia cuenta a la víctima y llevarlo al centro de salud más cercano, pero fue demasiado tarde.
De acuerdo con informaciones, el cuerpo de Santiago Polanco sería velado desde ayer en hora en horas de la tarde en la funeraria Blandino de la Abraham Lincoln.
Bomba seguía cerrada
Un día después de que ultimaran al gerente de esa bomba de gasolina, se comprobó que ese establecimiento permanecía cerrado y sin flujo aparente de empleados.
Pasadas las 12:00 del mediodía se pudo apreciar a varios miembros de la la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim), quienes no ofrecieron detalles al respecto debido a que se lleva a cabo una investigación.
Denuncian falta de patrullaje
Los lugareños coincidieron en decir que hace falta patrullaje policial y militar en ese sector, en vista de los frecuentes asaltos y robos.
Asimismo, deploraron que próximo a donde ocurrió el hecho, está la Dirección Central de Antipandilla. Sin embargo, permanece la inseguridad y los hechos delictivos en ese barrio.
