Ver a través de una pared no es algo sencillo, el ojo humano no puede ver a través de un objeto opaco, quizás algún superhéroe con sus rayos láser sí, pero nosotros necesitamos hacer uso de la tecnología. Actualmente, el método más “sencillo” es utilizando una cámara térmica, que nos permite detectar elementos tras un objeto opaco por la energía que desprende. Pero gracias a una nueva tecnología desarrollada por ingenieros del MIT, con una cámara reflex o incluso con un teléfono móvil podremos saber qué hay detrás de una pared u objeto opaco.
¿Cómo es posible esto? Hay truco, y es que se basa en analizar las sombras que genera un objeto. Al analizar de cerca la forma, el tono y el movimiento de las sombras que aparecen al lado de una pared, se puede determinar qué hay detrás. Gracias a un algoritmo capaz de entender estos factores de las sombras se puede detectar un objeto y sus movimientos con tan sólo mirar en las esquinas de una pared.
Una tecnología (de momento) limitada
Según los desarrolladores de momento la tecnología es algo limitada. Al basarse en formas de sombras tan sólo puede detectar su presencia pero no su factor forma, composición o detalles del mismo. Por otra parte, como es obvio, al tratarse de un análisis de las sombras se requiere de un ambiente iluminado que genere sombras del objeto.
Según han indicado los desarrolladores a The Verge, el sistema requiere de un ordenador por el momento. Pero no supondría ninguna dificultad integrarlo en un teléfono móvil por ejemplo, dada la potencia de los actuales dispositivos móviles. ¿Es en los móviles donde más provecho se le sacaría? Seguramente no.
Con un gran potencial por delante
Según indican sus creadores, CornerCameras (que es el nombre que recibe esta nueva tecnología) se podría aplicar muy bien a los sistemas de conducción autónoma. No tiene que existir una pared de por medio, la tecnología ya es útil de por si por analizar sombras. Aplicada al sistema de sensores de un coche autónomo, podría detectar si otro coche, un peatón o un ciclista se acerca por uno de los laterales para evitar el impacto.
De hecho, ya han probado este tipo de escenarios, y funciona sorprendentemente bien. Además, el coche no necesita saber muchos detalles de lo que se acerca por un lateral, no importa que sea un coche amarillo, uno rojo o si es descapotable o no, importa evitar un choque. Tarde o temprano, este tipo de tecnologías se integrarán en los servicios de conducción autónoma, y sin darnos cuenta.