Puerto Plata. La mayoría de los ríos de la parte suroeste de Puerto Plata permanecen secos, lo que unido a la extracción de materiales de los afluentes, presuntamente apañados por alcaldes de varios municipios, agrava la crisis.
Las fuentes acuíferas, además de la ganadería y la agricultura en los municipios de Luperón, Villa Isabela y otras zonas productivas de la parte suroeste de esta provincia atlántica se han visto mermadas.
Al alcalde de Imbert, José Tomás Díaz se le acusa de utilizar equipos para extraer materiales en el sector de la Grúa en la comunidad de los Cafeses, mientras que a Aladino Ulloa Mena, contratista del municipio de Guananico, por la misma acción pero contra el río Bajabonico, Saballo y Obispo.
El director provincial de Medio Ambiente, Danilo Morrobel dijo que cuenta con las evidencias para el sometimiento contra ambos por daños a varios afluentes.
Los ríos Bajabonico y Caonao, que recorren parte del territorio del municipio de Luperón y el Unijica que desemboca en las proximidades de La Isabela histórica, sus cauces han sido afectados sensiblemente, mientras que arroyos, cañadas, lagunas y norias, también se han secado por la falta de lluvias.
Representantes de organizaciones ambientalistas denuncian gran deforestación y la operación de varias granceras, que afectan desde hace algún tiempo los ríos de esa zona.
Vinicio Tavárez Vargas, presidente de la Asociación de Ganaderos de Luperón, aseguró que debido a la fuerte sequía decenas de reses han muerto en varias comunidades de esa región, ya que también se ha reducido de forma notable la producción de leche y carne.
Dijo que a la falta de agua y pastos para la alimentación del ganado vacuno, ha obligado a los productores a comprar alimentos procesados y numerosos camiones de agua, para así poder preservar la vida de sus animales. En otras zonas se evidencias daños hasta en el entorno de la loma Isabel de Torres.