El Junkers Ju 52 era operado por la aerolínea suiza JU-AIR en paseos recreativos y se precipitó sobre la montaña Piz Segnas, en los Alpes. Llevaba tres tripulantes y 17 pasajeros a bordo
Una icónica aeronave de transporte de la Segunda Guerra Mundial, el Junkers Ju 52/3M, se estrelló el sábado en Suiza mientras realizaba un vuelo turístico sobre los Alpes, causando la muerte de sus 20 ocupantes.
Se trata de uno de los últimos ejemplares de este avión, diseñado en 1930, que se encuentra en funcionamiento en el mundo, y era operado por la empresa JU-AIR para paseos recreativos.
El accidente se produjo en los alrededores de la montaña Piz Segnas, a unos 2540 metros sobre el nivel del mar, en el cantón suizo de Graubünden, en el este del país.
De acuerdo al periódico suizo Blick el Junkers 52 tenía capacidad para 17 pasajeros y tres tripulantes y estaba lleno, cumpliendo un vuelo entre Locarno y Dübendorf. La policía suiza confirmó luego que los 20 habían fallecido.
JU-AIR había confirmado el accidente en su página oficial, pero sin hacer referencia al número de personas a bordo ni a las posibles causas. “El equipo de JU-AIR se encuentra profundamente afligido y piensa en los pasajeros, la tripulación y en las familias y amigos de las víctimas”, indicó.
Un importante operativo de rescate se montó en los Alpes, empleando cinco helicópteros, hasta encontrar los restos del avión estrellado y las víctimas, reportó el periódico alemán Die Welt.
JU-AIR vuela cuatro Junkers 52, de un total de ocho aún operativos en todo el mundo. Ofrece vuelos de placer sobre los Alpes para entusiastas de la aviación.
La aeronave accidentada, matrícula HB-HOT, fue fabricada en 1939, el mismo año en el que estalló la Segunda Guerra Mundial, según informó la agencia de noticias de Suiza, por lo que se trataba de un avión de casi 80 años de antigüedad.
Diseñado por la empresa alemana Junkers, el “Tante Ju” (Tía Ju, como se lo conoce) es un avión de transporte y de pasajeros que tuvo gran éxito en la década de 1930 operando para las aerolíneas Swissair, de Suiza, y Lufthansa, de Alemania.
Durante los años de la guerra, entre 1939 y 1945, fue utilizado por la Luftwaffe, entonces fuerza aérea del régimen nazi, como transporte de tropas y para el lanzamiento de paracaidistas, participando activamente en la invasión de Creta, entre otras campañas, y ganándose una reputación de confiabilidad y robustez.
Se fabricó entre 1931 y 1952, y en las décadas posteriores llegó a convertirse en un icono de los comienzos de la aviación comercial y militar, especialmente en Europa.