Manila, (EFE).- Tras superar una campaña de ciberacoso y problemas de patrocinio, la modelo y empresaria dominicana Sal García espera ganar la corona de Miss Universo 2016 con sus exóticos “rasgos asiáticos” como principal arma.
“Dicen que parezco un poco asiática, que mis rasgos son un poco asiáticos, puede ser que esto me ayude”, explica Rosalba “Sal” García, de 24 años y natural de Maimón (norte), en una entrevista con Efe en Manila, donde el lunes se celebrará la final.
Sal, que combina las pasarelas con estudios de comunicación social y su propia academia de modelaje, etiqueta y protocolo, es considerada una de las favoritas, un logro que asegura merecer por las dificultades que ha sufrido en el último año.
“Recibí acoso desde el día número uno y no tuve el apoyo de mi país en el sentido económico porque entendían que no tenía posibilidades de ganar”, afirma esta modelo de alta costura que ha desfilado para Jean Paul Gaultier, Gucci, Prada y Carolina Herrera.
La joven precisa que la campaña en su contra -tuvo incluso que solicitar apoyo económico en las redes sociales para presentarse a Miss Universo– fue por tener “un prototipo diferente al que todos estamos acostumbrados, de ojos claros y con más volumen en su cuerpo. Yo soy todo lo opuesto”. Sin embargo, reconoce que a medida que su nombre ha empezado a sonar como uno de los favoritos esta situación ha cambiado.
“Ahora estoy recibiendo más apoyo por la desenvoltura que he tenido en Miss Universo y que ellos han visto que puedo dar más de lo que esperan. Ya he recibido el cariño y el apoyo de todas las personas de mi país”, apunta.
Las 86 candidatas a esta tardía edición de Miss Universo 2016 participan estos días en diversos actos y desfiles previos a la gala final, que tendrá lugar el lunes a las 08.00 en Manila (00.00 GMT).
Allí se hará una primera elección de las doce concursantes que han recibido más apoyos a través de la página web oficial del certamen y después el jurado proseguirá con las cribas hasta reducir a la mitad el número de aspirantes.
Las seis candidatas se enfrentarán a una entrevista de la que saldrán tres finalistas que se subirán de nuevo a la pasarela en un último desfile para despejar las dudas de los jueces.
Sal García espera ser la elegida, pero si no lo logra, sus planes de futuro seguirán siendo los mismos- “me veo como una buena empresaria en el mundo de la moda, teniendo una línea de productos de cabello y trajes de baño, y estudiando actuación”, sentencia.