Para el expresidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario, no hay duda de que la suspensión de las elecciones municipales convocadas para este domingo 16 de febrero afecta la democracia, por considerar que se registró “el más duro golpe en los últimos 50 años desde el punto de vista del funcionamiento del sistema electoral”. Sin embargo, hace un llamado a los líderes políticos a mantener la calma y a aprender de estas lecciones lo positivo.
Una de las consecuencias que, a su juicio, se desprende de la decisión anunciada a las 11:11 de la mañana por el presidente de la JCE, Julio César Castaños Guzmán, de suspender el proceso a nivel nacional, es que “bajará mucho la credibilidad” del ciudadano.
“Esto puede disminuir la participación del elector, que ahora hay que tratar de convencerlo de que los próximos procesos que se van a realizar van a ser transparentes y de que su voluntad va a ser respetada”, dijo Rosario.
Lo que provocó la suspensión de las elecciones en las que se escogerían 3,849 cargos entre alcaldes, regidores, directores de distritos municipales y vocales fue generado por la propia Junta Central Electoral, aseguró Roberto Rosario.
“No es el resultado de una acción de fuera, no es el resultado de un hecho ocasionado por acciones naturales, digamos un ciclón o huracán, sino de una evidente incompetencia que hubo de los técnicos del proceso, sobre todo desde el departamento de informática que evidentemente permitió que colapsara el sistema”, aseguró.
En declaraciones a la prensa, el expresidente de la Junta Central Electoral reconoció que fue correcta la decisión de suspender las votaciones debido a las fallas en el sistema del voto automatizado, en el entendido de que si duraban más para hacerlo se hubiera creado no solo de crisis política, sino una crisis de todo el sistema que pondría en juego todas las instituciones democráticas.
Al ser cuestionado sobre las peticiones de que renuncien los actuales miembros del pleno de la JCE tras el colapso del proceso, consideró que no es prudente que se refiera al tema y afirma que “eso hay que dejárselo a los que no han tenido la función que yo tuve”.
Respecto a si deben unificar las elecciones, afirma que existe una intención desde el Gobierno de provocar una crisis para propiciar una nueva reforma electoral.
“Creo que hay un interés desde el Gobierno, específicamente del presidente Danilo Medina de viabilizar una reforma constitucional para él presentarse como candidato. Lo que me preocupa es que detrás de todo esto está la mano oculta del Gobierno para que colapsara la elección y ellos poder introducir de nuevo el proyecto de modificación de la Constitución y tratar de imponerse de nuevo. Pero, el pueblo lo rechazó en el Congreso y perdió la reforma y ahora lo va a rechazar de nuevo”, puntualizó.