El Comité Nacional Republicano presentó hoy una solicitud oficial ante el Departamento de Estado para que aclare si la exsecretaria de Estado estadounidense Hillary Clinton firmó un formulario declarando que había devuelto todos los registros oficiales cuando renunció a su cargo en 2013.
Los republicanos han hecho uso de la Ley de Libertad de Información para exigir una copia de la llamada “Declaración de separación” que pudiera haber rubricado Clinton, tras las recientes revelaciones de que la también exprimera dama utilizó su correo electrónico privado para asuntos de Estado.
Este tipo de documento confirma el compromiso del empleado saliente de “haber transferido a un funcionario responsable todos los documentos no clasificados y documentos relativos a los asuntos oficiales del Gobierno”.
El Departamento de Estado ha declinado en repetidas ocasiones responder a las preguntas de los periodistas a este respecto, como hizo este mismo lunes su portavoz, Jen Psaki, en su rueda de prensa diaria.
“No tengo ninguna actualización sobre esto. Todavía estamos trabajando en ello. Estamos tratando de obtener una respuesta. Hoy no la tengo”, aseguró Psaki.
“Hillary Clinton violó claramente el espíritu de la ‘Declaración de separación’ que obligó a firmar al resto del Departamento”, dijo en un comunicado el presidente del Republican National Committee (RNC), Reince Priebus.
“Si bien el Departamento de Estado ha fallado en responder si ella firmó el acuerdo, no puede ignorar una solicitud bajo la Ley de Libertad de Información”, indicó el republicano sobre la petición formal.
El RNC pretende saber si Clinton violó las directrices del Departamento de Estado al no firmar la declaración, o si la firmó y, como resultado, incumplió la ley al no transferir todos los documentos.
“Vamos a agotar todas las opciones administrativas y consideraremos una potencial acción legal si el Departamento de Estado no cumple con esta petición”, agregó Priebus.
La solicitud del Partido Republicano también alude a las mismas declaraciones de tres ex altos asesores de Clinton: la que fuera jefa de su gabinete, Cheryl Mills; la subdirectora, Huma Abedin; y el secretario adjunto de Estado Philippe Reines.
