NUEVA YORK.- La viuda Isabel Bautista rompió el llanto cuando comenzó el minuto de silencio dedicado a las 256 víctimas del vuelo 587 de American Airlines (AA).
Todavía conmocionada por la pérdida de su esposo Baudilio Bautista hace 14 años, la mujer buscó el consuelo en los brazos de su hija y su nieta durante la ceremonia solemne de recordación realizada este jueves en la bahía de Belle Harbor, Queens.
“Este año sentí más profundamente la ausencia del amor de mi vida”, dijo la mujer, quien sostenía un ramos de rosas blancas. “Así pasen mil años, el dolor se siente como si fuera el primer día”.
A diferencia del año pasado, el alcalde Bill de Blasio acudió puntual a la recordación del 14 aniversario de la tragedia, ocurrida a las 9:15 am del 12 de noviembre de 2001, cuando el Airbus A-300 estalló a pocos minutos de despegar del aeropuerto John F. Kennedy.
“Hoy recordamos un evento catastrófico que sacudió a todos los neoyorquinos, pero con más dureza a la comunidad dominicana”, dijo el mandatario, quien confortó a las familias antes de iniciar la ceremonia.
Karen Tavares (43) contó a De Blasio que un velo de dolor se extiende cada año en las cenas del Día de Acción de Gracias. La muerte de su madre Virgilia Tavares y de su sobrino de tres años, Steven Lora, es insuperable para la residente de El Bronx.
“Me sentí consolada por el Alcalde”, dijo Tavares, quien leyó en la ceremonia una parte de los nombres de las víctimas, 175 de ellas de origen dominicano. “Los años no han curado la inmensa tristeza en mi corazón. En nuestras cenas del Día de Acción de Gracias, dos sillas están vacías. Nada puede aliviar esa pérdida”, dijo la mujer.
El año pasado De Blasio llegó 20 minutos tarde al evento de recordación, lo que provocó el descontento de los deudos. Más tarde las asperezas entre el Alcalde y la comunidad dominicana se agudizaron cuando el mandatario hizo declaraciones acerca de la crisis de inmigración en Quisqueya.
