Entre la República Dominicana y Polonia no hay acuerdos de extradición, por lo que las autoridades nacionales apelarán a otros mecanismos para lograr que no “haya impunidad” en el caso de denuncia de que el sacerdote Alberto Gil Nojache, de la iglesia San Antonio de Padua, en Jánico, Santiago, habría violado a por lo menos 14 niños vinculados a la parroquia.
En ese sentido, el procurador general, Francisco Domínguez Brito, dijo que se está coordinando el proceso de investigación, “a nivel internacional haremos los arreglos convenientes de cara a los acuerdos internacionales que puedan existir, que si bien es cierto que no hay acuerdo de extradición, si hay otros acuerdos y mecanismos que pudiéramos utilizar para lograr que no haya impunidad en ese caso”.
Aunque informó que aún no se tiene información del paradero del religioso, explicó que podrían recurrir a mecanismos como la colaboración a través de la INTERPOL y otra forma de cooperación de países europeos en el caso de abuso contra menores y pedofilia, entre otros casos criminales.
El responsable del Ministerio Público explicó del proceso de investigación que se está llevando a cabo en este caso, que ha incluido interrogatorios, entrevistas a los menores víctimas, experticia médico-forense y levantamiento de los sistemas informáticos de la oficina del religioso católica.
Confirmó que las investigaciones preliminares confirman que habido abuso contra los menores, “así lo confirman las dos o tres entrevistas que se han realizado”.