Raquelita Guerrero, una madre abnegada bajo un historial de violencia, el cual se encargó de reportar, nunca imaginó que el día de hoy enfrentaría la tragedia de velar a su madre y mantenerse fuerte para recuperar la salud de su primogénito.
Gustavo Enrique de 19 años de edad quería defender a su abuela y hermanos menores del agresor Ricardo Antonio Abreu, quien fuese su padrastro, demostrando la valentía del joven que ahora se debate entre la vida y la muerte.
“En el año 2020 a él se le puso una orden de alejamiento, lo apresaron y luego lo soltaron”, detalló la madre.
Un total de 8 estocadas les fueron propinadas a Gustavo, quien se encuentra ingresado en el Hospital Traumatológico Doctor Dario Contreras, para su abuela y madre de Raquelita falleció al momento de los hechos y sus restos serán velados en funeraria Blandino de la Avenida Sabana Larga.
“El duró una hora y media sangrando por todas sus heridas, con trauma y está debatiendo su vida pero nosotros estamos aquí, porque él va a salir de ahí”, añadió Guerrero.
Hoy por primera vez Raquelita puedo ponerse en contacto con sus otros tres pequeños hijos, los cuales presenciaron el vil asesinato de su abuela y las heridas que han puesto en jaque la vida de su hermano Gustavo.
“Mi madre murió, para mí el ser más importante, todo el que me conoce o me da seguimiento sabía que para mí ella lo era todo y mis hijos mi fuente, mi fortaleza, toda mí lucha, trabajo y vida ha sido por ellos”, dijo Raquelita.
Raquelita ha demostrado fortaleza y positividad incluso cuando está pasando por un momento que dejará un sello permanente en su vida, orando y clamando a Dios es su forma de hacerle frente a todo su entorno.
A la vez la familia Guerrero dio las gracias por todas las personas que se han preocupado y colaborado con la situación, en la misma línea expresó su admiración y respeto por la Chef Tita quien en palabras de Guerrero “nunca más le ha soltado la mano” luego de acogerla.
Raquelita fue participante del reality show de culinario Masterchef en su tercera temporada y desde ese momento externó en el programa la situación con su ex pareja y padres de tres de sus cuatro hijos.
No quiere volver a casa
La propiedad ubicada en Santo Domingo Este, que hasta antes del suceso reinaba la paz y el amor, ahora mismo para la joven madre es una imagen repetitiva de un lado oscuro de su vida.
“Yo no he podido entrar, ahora estoy sin casa, no quiero vivir ahí”, narró con tristeza Raquel.
Raquel dice que es imposible volver a la casa, ya que esta está “marcada” y esta en negativa de retornar a donde fuese su hogar.