El Gobierno le propuso un incremento salarial de hasta un 68% para las enfermeras, auxiliares de enfermerías, bioanalistas y psicólogos, así como de un 39% para los médicos.
En el diálogo que mantienen las autoridades con el sector salud plantea la unificación salarial, incluyendo los incentivos fijos que reciben todos los trabajadores y cumplir con la disposición que establece la jornada laboral única.
Argumentan que la medida beneficiará a todos los trabajadores del sector salud, porque dejarían de tener jornadas de trabajo de 16 horas por una de ocho horas, sin reducción de ingresos y en un solo centro de trabajo.
No obstante, aclara que el salario resultante de esa unificación para cada empleado involucrado en el proceso de transición no será considerado el sueldo de referencia para la escala salarial del Servicio Nacional de Salud (SNS).
Ese aspecto es válido exclusivamente para los trabajadores de salud incluidos en la nómina del SNS y del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS) al 31 de diciembre 2015.
En lo relativo a las pensiones, el Gobierno accedió a realizar una concesión especial a los gremios para pensionar o jubilar, mediante decreto, más de 6,000 empleados del sector, con el último salario e incentivos, incluyendo todo asalariado en trámite de pensión, personal con alguna dificultad de salud y todo empleado con más de 65 años de edad y 20 años de servicio.
Una fuente del gobierno cercana a las negociaciones con el sector salud, confió a Diario Libre que las conversaciones han dado frutos positivos hasta ahora, ya que han logrado un consenso en 3 de los 8 puntos acordados.
En su opinión, el Gobierno considera que la prioridad es lograr un servicio de calidad y eficiencia para las ciudadanas y ciudadanos, pues el sistema de salud requiere de grandes cambios que permitan un mejor servicio a la población.
Por eso sostiene que en el marco del diálogo, el Gobierno ha planteado que se requiere que las partes alcancen un consenso en beneficio de la población dominicana para que reciba un mejor servicio de salud, y que por eso ha puesto todo su empeño en conseguir acuerdos razonables y que se puedan lograr en el tiempo. Reveló que en esas discusiones también se ha debatido, y es la meta de cara al mediano plazo (2018), la necesidad de establecer un sistema de compensación por desempeño que elimina “el injusto esquema de que el que menos trabaja gana más, por uno en el que el aumento del ingreso esté atado a su trabajo”.
Bajo ese modelo, dice la fuente que reveló a DL interioridades del proceso de negociación, los servidores del sector salud, según el desempeño en sus funciones, tienen la oportunidad de recibir mayores ingresos por su esfuerzo.
“Con esto se introduce una cultura de meritocracia, colocando otros incentivos que motiven al personal a comprometerse con garantizar niveles de productividad y calidad significativa, en provecho de la población dominicana que tanto necesita una mejor atención de los servicios de salud”, adujo.