Hay mujeres que sienten dolor, ardor o picazón en la vagina. También pueden sentir ardor al orinar, un flujo vaginal leve y hasta molestia durante las relaciones sexuales. Quizás todo esto se deba a que padecen de resequedad vaginal, también conocida como vaginitis atrófica. Ésta se presenta cuando los tejidos de la vagina no están bien lubricados y sanos.
Carlos E. Álvarez Rivera, ginecólogo con oficina en el Instituto San Pablo, en Bayamón explicó que los estrógenos son los que mantienen los tejidos de la vagina lubricados y saludables y listos para la actividad sexual.
“El revestimiento de la vagina produce un líquido lubricante que ayuda a disminuir la resequedad vaginal y también hace que las relaciones sexuales sean más cómodas. Si los niveles de estrógenos disminuyen, el grosor de la vagina se pone más delgado y pierde elasticidad”, señala el experto.
Advierte el médico que, después del parto o mientras la mujer están amamantando, los niveles de estrógeno están más bajos y podría causar resequedad vaginal.
“Esto puede suceder en la etapa premenopáusica. Los niveles de estrógenos normalmente disminuyen después de la menopausia”, dice.
La vagina se puede irritar por jabones, detergentes, lociones, perfumes o duchas. Ciertas medicinas, el tabaquismo, tampones y condones pueden causar o empeorar la resequedad vaginal.
¿Qué pruebas se pueden hacer?
Según el galeno, un examen de la pelvis puede mostrar si las paredes vaginales están delgadas, pálidas o rojas. “También se puede analizar el flujo vaginal para descartar otras causas de la afección. Igualmente, se pueden realizar exámenes de los niveles hormonales para averiguar si ha llegado a la menopausia”, agregó Álvarez Rivera.
¿Qué tratamientos hay?
Hay muchos tratamientos para la resequedad vaginal. Antes de tratar los síntomas usted por su cuenta, debe ir a su médico para determinar la causa del problema. Un tratamiento apropiado aliviará los síntomas la mayoría de las veces.
Según el doctor Álvarez Rivera, hay lubricantes y cremas humectantes vaginales, que se pueden comprar sin receta médica. “La persona se lo pone dentro de la vagina y el efecto le puede durar hasta tres días. Se recomienda se utilice dos veces en semana, para mantener humectada la vagina y no tener e esa sensación de resequedad”, manifestó.
El estrógeno recetado puede ser eficaz para tratar la vaginitis atrófica. “Le va a devolver vitalidad y humectación a la vagina. Está disponible en crema, tableta, supositorio o anillo, todos se colocan dentro de la vagina. Estas medicinas liberan estrógeno directamente en la zona vaginal”, expresa.
Tu médico te puede recetar estrógenos en forma de un parche cutáneo o una píldora que se toma por vía oral, si tiene sofocos u otros síntomas de menopausia.