La destrucción de gran parte de la infraestructura en esta isla a causa del huracán María, con pérdidas estimadas por el gobierno entre los 80,000 a 100,000 millones de dólares, abrirá la oportunidad de trabajo y de negocios a miles de dominicanos que residen en esta nación o que podrían venir desde República Dominicana.
Los dominicanos tienen casi el dominio total del sector, y sus maestros y obreros son los encargados de la construcción o reparación de edificios y viviendas.
Además, en Puerto Rico están instaladas importantes empresas constructoras que son propiedad de ingenieros dominicanos.
También, los insumos ferreteros y eléctricos son comprados en República Dominicana.
Las varillas y los receptáculos eléctricos que se usan aquí vienen de República Dominicana, según explican los comerciantes del área.
La agroindustria podría ser uno de los pilares de este negocio porque la agricultura quedó semidestruida.
Se estima que unas 400,000 personas perdieron su empleo en Puerto Rico a causa de los daños por María, que entró por el centro de este territorio con categoría 5.
Muchos dominicanos están en refugios porque sus casas quedaron destruidas en San Juan, Caguas y Carolina.
Eso pronostica un aumento del desempleo en lo inmediato y ya a muchos dominicanos les han entregado sus cartas de desahucio, debido a que muchas fábricas decidieron cerrar a falta de energía eléctrica, por daños a sus infraestructuras o por la evidente situación general.
Esto motivó que el secretario de Trabajo, Carlos Saavedra, afirmara que el desempleo es uno de los efectos catastróficos del impacto del huracán.
Se estima que en esta isla de las Antillas Mayores, viven 225,000 dominicanos la mayoría en el área metropolitana, como San Juan, Caguas y Carolina.
“Va a haber oportunidades de negocios. Aquí hay casas que va a ver que construirlas. Va a haber oportunidades de trabajo, porque las estructuras están destruidas”, consideró el cónsul dominicano, Franklin Grullón.
Dijo que eso creará un gran dinamismo en el área de la construcción, donde los obreros y los “maestros constructores” dominicanos serán los beneficiados.
Explicó que además habrá una “fuga” de empresarios hacia República Dominicana y de turistas, ya que la infraestructura hotelera quedó muy lastimada.
“Pero tenemos un gran compromiso con Puerto Rico, porque acogió a esa gran comunidad dominicana”, agregó.
“Es diferente que un furgón de yuca de Costa Rica, que tiene que llegar a Miami y durar entre 20 y 28 días para llegar aquí, a que tú lo pongas en la noche en un barco y al otro día este aquí”, refirió Grullón para avalar la oportunidades de la agroindustria dominicana en el mercado de Puerto Rico en las actuales circunstancias.
El plátano, que se traía pelado, ahora se permite traerlos en su cáscara, explicó.
Sin embargo considera que el impacto inmediato será negativo por las remesas que se envía al país, “y en este caso pasa lo contrario, la ayuda llega de República Dominicana”.
El huracán María destruyó la mayor parte de la infraestructura.
EL NEGOCIO DE LAS PLANTAS
La venta de plantas para suplir el colapsado sistema eléctrico se ha convertido en una gran fuente de negocios.
Son muchas las plantas que están llegando de República Dominicana y de otros lugares de Estados Unidos, explicó el cónsul Grullón.
El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, informó ayer que se aumentó el servicio de energía eléctrica de siete al 15 % después de que se normalizara la planta 6 de la subestación de San Juan. Eso quiere decir que el 85% de la población aún no tiene este servicio, y las plantas son las alternativas, para los servicios básicos, como prender los abanicos para dormir.
El cónsul considera que cuando se termine de resolver la situación de los puertos y aeropuertos, mejorará el comercio y los aportes dominicanos a este lugar.
“Por ejemplo, el Ferry solo puede hacer dos o tres viajes, porque inicialmente no podía entrar porque la Aduana Federal estaba devastada, y no había la posibilidad de traer”, explicó el representante del Poder Ejecutivo de la República Dominicana ante el gobierno de esta isla.