Los productores de uva del Valle de Neyba aseguraron ayer que se encuentran en bancarrota, debido a que no les han entregado los equipos para una bodega vinícola que fueron donados por la Confederación de Vitivinicultores de Marchena Italia.
El vocero de la Cooperativa de Vitivinicultores del Valle de Neyba (Coopevine), Wilson Díaz, aseguró que el director del Instituto Nacional de la Uva (Inuva), Mario Pérez, no les ha entregado la maquinaria donada porque considera que ellos como productores no tienen la capacidad para manejarla.
Durante una rueda de prensa, Díaz expresó que solo hace falta un plan de desarrollo sostenible para poder dar un salto cuantitativo y cualitativo en la producción de uva en el país, pero especialmente en Neyba.
Aseguró que antes había más de 6,000 tareas de uva sembradas y que en la actualidad la siembra no llega ni a 2,000. Dijo que antes había más de 600 empleados, pero que ahora solo hay 162.
Agregó que solo producen un 10% de lo que siembran, porque la uva se daña por falta de la maquinaria que se necesita para su producción.
De igual manera, solicitaron al presidente Danilo Medina designar mediante terna un nuevo director del Instituto Nacional de la Uva (Inuva).