El presidente de México, Enrique Peña Nieto, condenó hoy la violencia durante la campaña para las elecciones del próximo 1 de julio, que ha dejado casi un centenar de candidatos asesinados, y prometió que el Gobierno trabajará para garantizar la “paz y seguridad” durante los comicios.
“En los últimos meses, aspirantes a cargos de elección popular han perdido la vida o han sido víctimas de la delincuencia. La violencia por motivos electorales en cualquier parte de la geografía nacional es inaceptable”, aseguró el mandatario en un acto de Protección Civil en Acapulco, estado de Guerrero.
Peña Nieto condenó “todo tipo de violencia” y aseveró que el Gobierno “seguirá trabajando con las entidades federativas y las autoridades electorales para brindar condiciones de paz y seguridad en este proceso electoral”.
Según el Cuarto Informe de Violencia Política en México 2018 de la consultora Etellekt, desde que se inició el proceso electoral en septiembre pasado y hasta el 8 de mayo ha habido 305 agresiones, y al menos 94 políticos fueron asesinados.
De acuerdo con el presidente mexicano, que dejará el cargo el 1 de diciembre, los comicios presidenciales, estatales y locales de julio “pondrán a prueba la fortaleza institucional y la madurez democrática” del país, por lo que pidió evitar “la crispación social”.
El 1 de julio están llamados a las urnas 89 millones de personas para elegir al presidente de México, los diputados, los senadores, ocho gobernadores, el jefe de Gobierno de Ciudad de México y más de 3.400 cargos locales.
