ROMA (Reuters) – Los precios mundiales de los alimentos subieron levemente en septiembre, aproximándose a los niveles alcanzados durante la crisis alimentaria del 2008, dijo el jueves la FAO, recortando marginalmente sus previsiones de producción mundial de cereales.
La peor sequía en más de 50 años en Estados Unidos envió los precios del maíz y la soja a niveles récord durante el verano boreal, y, junto con la sequía en Rusia y en otros países exportadores del Mar Negro, elevó los temores de una nueva crisis.
Los precios de los granos han bajado en las últimas semanas debido al rápido progreso de la cosecha y la preocupación por la débil demanda en medio de una desaceleración de la economía global.
Pero el índice de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por su sigla en inglés), que mide los cambios mensuales en precios de una cesta conformada por cereales, oleaginosas, productos lácteos, carne y azúcar, promedió 216 puntos en septiembre, 3 puntos al alza desde la lectura en agosto, dijo la FAO en su actualización mensual.
El aumento refleja principalmente alzas en los precios de los productos lácteos y de la carne, con más aumentos contenidos para los cereales, dijo la FAO.
“Los precios permanecen altos (…) se han mantenido. Es muy poco probable que veamos una normalización de los precios en el corto plazo”, dijo a Reuters el economista de la FAO Abdolreza Abbassian en una entrevista telefónica.
Abbssian agregó, sin embargo, que no está claro si el leve aumento de septiembre significa que los precios se encuentran ahora en una tendencia al alza, pero dijo que espera que la volatilidad en los mercados pueda intensificarse en los próximos meses.
El índice de la FAO está por debajo del máximo de 238 puntos alcanzado en febrero del 2011, cuando los precios de los alimentos fueron un factor en los levantamientos de la Primavera Arabe en Oriente Medio y el norte de Africa. No obstante, los niveles actuales son muy similares a los observados en el 2008, que desataron disturbios en algunos países pobres.
La agencia con sede en Roma dijo que había recortado su previsión mundial de producción de cereales para el 2012 en un 0,4 por ciento, a 2.286 millones de toneladas, desde una estimación anterior de 2.295 millones de toneladas, debido principalmente a una menor cosecha de maíz en las partes centrales y del sudeste de Europa, donde los rendimientos han sido afectados por una sequía prolongada.
A pesar del alza en los precios de los alimentos, la misión de Estados Unidos en Roma ante las agencias de Naciones Unidas emitió un comunicado el jueves diciendo que acordó con otros países que no era necesario en este momento realizar una reunión de emergencia del Foro de Respuesta Rápida del ente de agricultura del G-20 (AMIS).
“Los mercados de productos básicos agrícolas están funcionando”, dijo la misión.
Abbassian sostuvo que una reunión ministerial que busca discutir los precios de alimentos más allá de las reuniones del G-20 sigue planeada para el 16 de octubre.
El presidente francés, Francois Hollande, ha lanzado una campaña mundial para crear unas reservas estratégicas de productos agrícolas, pero el Comisario de Desarrollo europeo, Andris Piebalgs, dijo esta semana que no era la mejor manera de controlar los precios de alimentos.
(Reporte de Catherine Hornby. Editado en español por Carlos Aliaga)