Nueva York.- El Departamento de Policía de esta ciudad (NYPD) ha decidido cambiar el método de sus agentes patrullar las calles de La Gran Manzana como medida de precaución, y de ahora en adelante será obligatorio que los policías salgan de tres, en vez de dos, a prestar sus servicios, usar chalecos antibalas, habrá vigilantes en los precintos, responder a todas las llamadas de radio con dos coches, estén alerta sobre su entorno y fueron suspendidas las patrullas auxiliares, conformadas por voluntarios uniformados desarmados.
Estas medidas han sido tomadas después que fueran asesinados sorpresivamente y por detrás, el pasado sábado en Brooklyn, los oficiales Rafael Ramos, de origen puertorriqueño, y el asiático Wenjian Liu, a manos de Ismaaiyl Brinsley, un pandillero perteneciente a “Guerrilla Family Negro”, quien era conocido como un criminal de toda la vida con vínculos en Brooklyn.
El cambio de protocolo se hace mientras se investiga una decena de amenazas contra policías en varios puntos del país, similares a las que hizo en las redes sociales Brinsley antes de acribillar a los oficiales Liu y Ramos, quienes se encontraban estacionados en una patrulla frente a un edificio de viviendas públicas en Bedford Stuyvesant, en Brooklyn.
Hasta ahora muchas de las amenazas han sido descartadas por no poseer ningún riesgo para los oficiales.
El Comisionado del NYPD, Bill Bratton, envío la madrugada de este domingo una directriz de alerta-seguridad a todos los comandos policiales de la Metrópoli.
Actualmente, el cuerpo policial de Nueva York está compuesto por 35,437 oficiales distribuido en los cinco boroughs de la ciudad y es considerado como la mayor fuerza del orden en Estados Unidos, teniendo como principales responsabilidades el hacer cumplir la ley y la investigación en Manhattan, El Bronx, Brooklyn, Queens y Staten Island.
Brinsley, asesinó a los policías Ramos y Liu utilizando una pistola Tauro de manera ilegal, horas después de llegar a Brooklyn procedente de Baltimore, donde en horas de las madrugada había herido gravemente a su ex novia.
Los legisladores estatales ya están exigiendo ventanas a prueba de balas en todos los coches de la policía de la Metrópoli.
