PUERTO PLATA.- Como un peligroso delincuente fue definido por la Policía Nacional el nombrado Franklin Antonio Flores Bonilla (El Mocanito), quien cayó abatido de tres balazos durante un enfrentamiento con agentes policiales en Cabarete.
El vocero de la Policía Nacional en Puerto Plata, coronel José Armando Brito Melo, aseguró que Flores Bonilla tenía un prontuario de infracciones a las leyes, entre los que figuran asesinatos por encargo (sicariato), entre otros delitos que lo encasillaron como un hombre activamente perseguido.
En horas de la tarde del viernes, el presunto delincuente de apenas 30 años de edad, fue impactado de tres balazos en la frente en Cabarete por una patrulla policial encabezada por el coronel Fajardo, durante “un enfrentamiento a plomazos limpios “con tres sujetos de los cuales dos lograron escapar, quedando el cuerpo inerte de Flores Bonilla tirado en el suelo con una pistola punto 40 en sus manos.
Se recuerda que el día primero de febrero del 2016, el presunto sicario El Mocanito fue sancionado con un año de prisión preventiva luego de que fue apresado en un vehículo rumbo a Puerto Plata y se le ocupó un bulto con más de mucho dinero en efectivo ya que además estuvo vinculado al sicariato.
La Fiscalía de Puerto Plata logró que se le impusieran una medida de coerción a Franklin Antonio Flores Bonilla (El Mocanito), ya que se le atribuyó ejecutar asesinatos por encargo en la modalidad de sicariato en las ciudades de Moca, Río San Juan, Gaspar Hernández, Cabarete y Sosúa.
Al momento de su detención, a Flores Bonilla se le ocupó un millón 358 mil 500 pesos y 328 dólares en efectivo, una pistola marca Smith & Wesson calibre 9 milímetros, dos cargadores para la misma con 18 cápsulas, dos celulares, una yipeta marca Hyundai Tucson color gris y un cuaderno con una gran cantidad de nombre de personas escritos.
El Ministerio Público presentó los elementos probatorios que demostraron la participación de “El Mocanito” en varios delitos con los cuales incurrió en franca violación a la ley 36 sobre porte y tenencia de arma de fuego y a la Ley 72-02 sobre lavado de dinero, siendo trasladado a la cárcel de Moca, pero sorprendentemente salió de la cárcel para volver a cometer sus fechorías.