Frustrada por su derrota en la segunda ronda del Mutua Madrid Open, la checa Karolina Pliskova se obligó a “mirar hacia delante” y a encontrar soluciones sobre arcilla para afrontar con garantías de éxito su participación en Roland Garros.
Negada la posibilidad de triunfar en Madrid dada su precipitada eliminación en la segunda ronda, Karolina Pliskova aseguró que no va a esperar “nada más” de la temporada sobre polvo de ladrillo y que rebajará sus expectativas sobre esa superficie, si bien recordó que todavía restan “dos torneos”.
“Veremos primero cómo me va en Roma donde, obviamente, intentaré prepararme para París”, agregó en alusión al segundo Grand Slam del año, donde partirá como una de las máximas candidatas al título.
Pliskova se mostró confiada en que tendrá “una oportunidad” de éxito en Roma o en Roland Garros. “Aunque quizás mi juego no esté hecho para la tierra”, apuntó.
La checa, que en la Caja Mágica partía como segunda cabeza de serie, asumió que debe adaptar su juego y sus movimientos.
“Hay algunas diferencias con respecto a la pista dura. Hoy he intentado moverme más rápido sobre la línea de fondo para tener más tiempo para preparar los golpes, pero no he tenido la oportunidad de ganar”, indicó sobre su derrota ante la letona Anastasija Sevastova, número 22 del ránking mundial.