WILMINGTON, Carolina del Norte, EE.UU. (AP) — Con Wilmington prácticamente aislado por las inundaciones causadas por el huracán Florence y personas esperando durante horas para recibir productos básicos como alimentos, el gobernador de Carolina del Norte pidió a los miles de evacuados que sean pacientes y todavía no regresen a sus hogares.“Sé que es difícil dejar el hogar, y es más difícil esperar y preguntarse si siquiera tienen un hogar al cual regresar”, señaló el gobernador Roy Cooper mientras las autoridades comenzaban a distribuir provisiones a los residentes de Wilmington, que cuenta con una población de 120.000 personas.La cifra oficial de muertos aumentó el martes a por lo menos 37 en tres estados, 27 de ellos en Carolina del Norte, mientras los remanentes de Florecen se iban en dos direcciones: el agua bajaba hacia la costa de Carolina y las tormentas se apresuraban al noreste, en donde inundaciones repentinas todavía golpearon Nueva Hampshire y el estado de Nueva York.
Cooper, advirtió que las inundaciones, de por lo menos 1 metro (3 pies), provocadas por Florence están lejos de terminar y empeorarán en algunos lugares.
“Sé que mucha gente siente que esto es como una pesadilla que simplemente no terminará”, dijo Cooper.
La Casa Blanca dijo que el presidente Donald Trump visitará Carolina del Norte el miércoles para ver los daños. Antes de eso, Trump alardeó en Twitter: “Ahora, todos dicen que hacemos un gran trabajo con el huracán Florence _ y están 100% correctos”. Advirtió que los demócratas comenzarán a criticar pronto la respuesta del gobierno y “esto será una total mentira, ¡pero es lo que hacen y todo mundo lo sabe!”.