MÉXICO. El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, llamó hoy a la ciudadanía a mantener la calma ante la emergencia que vive el centro del país tras el terremoto, que ha dejado según un nuevo reporte de las autoridades al menos 230 muertos, un centenar de ellos en la capital.
El respaldo a la población “ya está ocurriendo” con atención médica y apoyo a los afectados, expresó Peña Nieto en un recorrido por Jojutla, el municipio del estado de Morelos más afectado por el sismo de magnitud 7,1 en la escala de Richter.
El mandatario destacó la atención médica que se presta a los afectados en un hospital provisional que se ha instalado, ya que el que funcionaba en Jojutla resultó dañado por el terremoto, cuyo epicentro se localizó en Morelos.
“Tengamos serenidad. Hoy lo importante es que muchos de ustedes se han puesto a salvo”, manifestó Peña Nieto durante su recorrido en el que explicó a los pobladores el plan de acción que seguirán las autoridades.
Lo primero es la “atención inmediata” a los afectados por el terremoto, para después pasar a un censo que determine los daños en las viviendas y, finalmente, para dar paso a la entrega de apoyos económicos, explicó.
“Estoy aquí para comprometer los apoyos que el Gobierno” va a canalizar a las personas damnificadas, indicó el titular del Ejecutivo.
El censo se llevará a cabo durante varios unos días y, una vez terminado, se procederá a entregar los apoyos a las familias para la reconstrucción de sus viviendas, insistió.
El gobernador de Morelos, Graco Ramírez, decretó hoy cinco días de luto en el estado, donde 196 personas se encuentran hospitalizadas como consecuencia del terremoto.
“Hemos comenzado a dar paso a maquinaria para remover escombros en los municipios”, afirmó Graco, quien dijo que una vez terminada la evaluación de daños y el censo de damnificados, el estado se concentrará en la reconstrucción de las viviendas.