La industria de la moda dominicana se viste de luto, pues en horas de la tarde del lunes perdió a una de sus pioneras y grandes íconos: Farah Cabrera, quien, a su paso por la vida, aseguró exitosamente un amplio legado en el sector.
Con sus más de 50 años en la industria, esta santiaguera se convirtió en un referente del diseño de vestuarios, no solo en la región, sino en toda República Dominicana.
A modo de dejar claro su compromiso, una vez expresó que moriría con una aguja entre los dedos, pues desde la corta edad de 10 años confeccionaba sus propios vestidos, cuando acompañaba a su madre y su abuela entre hilos y agujas, situación que extendió hasta sus ochenta y tantos. En fin, llevó siempre el arte arraigado al corazón.
A pesar de que en el país no había escuelas para estudiar diseño de moda, y estudiar en el extranjero representaba barreras de costo e idioma, nunca se limitó y se dedicó a devorar libros de diseño y moda; se convirtió en autodidacta.
Este referente del estilo fue reconocida en 2022 por la Alcaldía de Santiago por su trayectoria de éxito y, junto con Irina de Fernández y Francisco Sanchís, engalana el segundo Paseo de la Moda dentro de los murales de ciudad del Ayuntamiento de la ciudad corazón.
Entre los aportes de Farah a la moda dominicana, a parte de los tantos diseños que completan su repertorio de elegancia y estilo, está la introducción del concepto boutique en el país, luego de inaugurar en 1968 su primera tienda bajo dicha característica en la Ciudad Colonial.
Además, esta artistas de los hilos y agujas santiaguera se destacó por apostar por las nuevas generaciones, empeñándose en compartir sus conocimientos, utilizando la formación como medio.