Ciudad del Vaticano.- En una audiencia con unas 800 monjas el Papa Francisco dijo este miércoles a las monjas de todo el mundo que deben ser madres espirituales, “no viejas solteronas”.
El Papa advirtió que no utilicen su vocación para su ambición personal; señaló que los sacerdotes y hermanas que incurren en este proceder “causan más daño a la Iglesia”.
El papa hizo sus declaraciones durante una audiencia con unas 800 monjas que asisten a la asamblea de la Unión Internacional de Superioras Generales, que reúne a autoridades de congregaciones religiosas de mujeres de unos 75 países.
La reunión tuvo lugar antes de la audiencia general de Francisco en la Plaza de San Pedro, donde el papa rompió con la tradición y caminó por de Dios.