El presidente Danilo Medina asistió hoy a la misa solemne con motivo del Día de la Virgen de la Altagracia, en la que el obispo de la diócesis de Higüey, Nicanor Peña Rodríguez, abogó por la seguridad ciudadana, el respeto a la vida y más oportunidades para los jóvenes. A la misa también asistió la vicepresidenta, Margarita Cedeño.
Durante la homilía, concelebrada en la Basílica, el obispo Peña Rodríguez manifestó que el que deje de amar a la Virgen de la Altagracia deja de amar a la patria “y ese día se pierde la soberanía”.
El religioso habló en un templo repleto de feligreses en el que insistió sobre el rechazo al aborto.
EL jefe de Estado llegó acompañado de su esposa, la primera dama Cándida Montilla de Medina a las 9:45 de la mañana siendo recibido con la salva de 21 cañonazos.
A su llegada, el mandatario fue saludado por el senador Amable Aristy Casto, el gobernador Ramón Guilamo Alfonso y el rector de la Basílica, Evaristo Areche.
Entre los funcionarios que acompañaron a Medina figuran el de Obras Pública, Gonzalo Castillo, de la Presidencia, José Ramón Peralta y de Salud, Altagracia Guzmán Marcelino.