WASHINGTON.- El presidente de EE.UU., Barack Obama, se reunirá mañana miércoles con los mandatarios de Liberia, Guinea y Sierra Leona, con el fin de evaluar los avances en la lucha contra el ébola en África Occidental, informó hoy la Casa Blanca.
Obama recibirá a la presidenta de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf; al de Guinea, Alpha Condé; y al de Sierra Leona, Ernest Bai Koroma; aprovechando que los tres líderes se encuentran en Washington para participar en las reuniones conjuntas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) de esta semana.
“El presidente de Estados Unidos conversará con sus homólogos de África Occidental los avances hasta la fecha en la respuesta internacional contra el ébola”, indicó el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca en su cuenta oficial de la red social Twitter.
Obama ya se reunió el pasado febrero con Johnson Sirleaf y se ha mantenido atento al desarrollo de los acontecimientos en los tres países más afectados por la epidemia de ébola.
A finales del año pasado, Obama ordenó el despliegue de 2.800 militares estadounidenses en la región para apoyar a las autoridades locales, y se estima que esos efectivos han formado a unos 1.500 profesionales de salud y gestionado la construcción de numerosas unidades de respuesta al ébola.
En febrero, ante el descenso en el número de casos de ébola, Obama anunció que apenas cien de esos militares se quedarían en la zona a partir del próximo 30 de abril.
A pesar de que la incidencia del ébola en África Occidental está decayendo considerablemente y todos los indicadores confirman que la tendencia para acabar con la epidemia es la correcta, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó la semana pasada que el brote es aún una emergencia sanitaria de alcance internacional.
La semana que concluyó el 5 de abril se registró la menor incidencia de casos de ébola desde la tercera semana de mayo de 2014, con solamente 30 infecciones.
En 15 meses, la epidemia de ébola en África Occidental ha infectado a 25.556 personas -confirmados, probables y sospechosos-, de las cuales 10.587 han muerto.