Washington (EE. UU.).- El presidente estadounidense, Barack Obama, celebró este lunes la “prometedora” designación del chií Haidar al Abadi como nuevo primer ministro de Irak, le urgió a formar Gobierno cuanto antes e instó a todos los actores políticos del país a contribuir a una “transición política”.
En una declaración ante la prensa desde su residencia de vacaciones, Obama advirtió que, pese a los bombardeos selectivos de EE. UU. contra el grupo yihadista del Estado Islámico (EI) en el norte de Irak, “no hay una solución militar estadounidense” a la crisis iraquí.
“La única solución duradera consiste en que los iraquíes se unan y formen un Gobierno incluyente, que represente los intereses legítimos de todos los iraquíes y pueda unificar la lucha contra EI. Y Irak dio un prometedor paso adelante en ese esfuerzo crucial (…) con la designación de Haidar al Abadi”, aseguró Obama.
“Urjo a todos los líderes políticos de Irak a trabajar de forma pacífica en el proceso político en los próximos días”, subrayó el mandatario desde la isla de Martha’s Vineyard (Massachusetts).
Esa aparente referencia al jefe de Gobierno interino, el chií Nuri al Maliki, fue la única que hizo Obama al hasta ahora primer ministro durante su breve intervención, que concluyó sin responder a una pregunta sobre si tiene algún mensaje para el desbancado líder iraquí, que se resiste a abandonar el poder.
EE.UU. considera a Maliki parcialmente responsable de las tensiones internas entre suníes y chiíes en el país, e insta desde hace meses a formar un Gobierno de unidad que permita resolver la crisis política que vive el país.
“Este nuevo Gobierno iraquí tiene una tarea difícil. Tiene que recuperar la confianza de sus ciudadanos gobernando de forma inclusiva y dando pasos para demostrar su determinación”, indicó Obama.
“Estados Unidos está preparado para apoyar a un Gobierno que haga frente a las necesidades y quejas de todo el pueblo iraquí”, agregó el mandatario, que hoy felicitó a Al Abadi por su nombramiento en una conversación telefónica conjunta con el vicepresidente de EE. UU., Joseph Biden.
Obama subrayó que, cuando el nuevo Gobierno iraquí esté en marcha, a EE. UU. le resultará “más fácil movilizar el apoyo” de otros países de la región “para lidiar con las crisis humanitarias y los retos de terrorismo en Irak”.
El presidente también destacó el “éxito” de los bombardeos selectivos que EE. UU. siguió desplegando hoy sobre posiciones del EI cerca de la ciudad de Erbil, y recordó que su Gobierno sigue proporcionando ayuda humanitaria “a diario” a los yazidíes que se refugian en el monte Sinyar.
“Nuestros aviones siguen posicionados para atacar a cualquier fuerza terrorista alrededor de la montaña que amenace la seguridad de estas familias”, advirtió el mandatario.
Obama agradeció a Francia, el Reino Unido y los otros países que están proporcionando asistencia humanitaria a los iraquíes, y aseguró que, a medida que algunos de los refugiados son evacuados de la montaña, EE. UU. trabaja con sus aliados “para desarrollar opciones que les lleven a un lugar seguro”.