Santiago.-Las autoridades municipales que asumirán la administración del ayuntamiento de Santiago, a partir del 16 de agosto de este año, tienen como tarea fundamental resolver el problema del tránsito y la construcción de un verdadero sistema de drenaje pluvial, en esta ciudad.
Estrechez de las calles, estacionamientos irregulares, violación a las señales de tránsito, bajo número de agentes de la Autoridad Metropolitana del Transporte y la complacencia de algunos, con conductores violadores de la ley, hacen del tránsito un caos permanente, tanto en la parte céntrica como en importantes avenidas.
Además de corregir esos males, se hace necesario, la regularización de las paradas de aguas interurbanas y taxistas que ocupan de forma irregular las intersecciones de las calles, obstaculizando el libre tránsito vehicular.
De igual forma constituye una necesidad que las autoridades municipales retomen el orden del estacionamiento en las vías, a fin de garantizar mayo visibilidad a los conductores cuando salen de una calle a otra.
El cambio en los estacionamientos se hizo con la instalación del desaparecido Sistema Regulado de Estacionamiento (Parquímetros), mediante el cual se dispuso el doble estacionamiento y la eliminación de la alterabilidad del parqueo de acuerdo a la entrada a calles principales, lo que evita que el conductor pueda visualizar el tránsito hacia su derecha.
En lo relativo al sistema de drenaje pluvial, cuya deficiencia provoca las inundaciones de calles y avenidas, es perentorio, retomar un programa de instalación del mismo a fin de evitar que cuando llueve el caos que se registra en el tránsito se agudice aún más.
Esta obra que resulta muy costosa y que administraciones pasadas han alegado, que el ayuntamiento no dispone los recursos para su implementación, urge que se busquen mecanismo, sea, a través de préstamo o la participación del Gobierno Central.
Se trata de un problema neurálgico porque además de las dificultades que la acumulación de agua en calles y avenidas, provocan para el flujo del tránsito, los daños que causan a los vehículos, esa situación, constituye además una amenaza para transeúntes que pueden ser arrastrado por las fuertes corrientes.
La falta de un adecuado sistema de filtrantes, provocan cuando llueve que avenidas, como la Salvador Estrella Sahdalá, 27 de febrero, Juan Pablo Duarte, Imbert, Cuesta Colorada y Circunvalación Sur, en diferentes tramos, imposibilitando el libre tránsito vehicular.