El cardiólogo y especialista de la medicina cardiovascular, doctor Samuel Ramos recomienda mantenerse hidratado y reducir los ejercicios físicos en tiempo de calor, para evitar el agotamiento.
Sostiene que todas las personas están en riesgo de sufrir una enfermedad relacionada con el calor, como el agotamiento por calor o el golpe de calor, si no se mantienen hidratados, pero algunas personas tienen un riesgo mayor:
“Las personas activas, que hacen ejercicio o pasan mucho tiempo al aire libre, los ancianos, personas con enfermedades crónicas (prolongadas) que toman ciertos medicamentos, los muy obesas, quienes trabajan al aire libre, tal como los albañiles y jardineros y los atletas que se entrenan al aire libre en el calor”, expresó.
Ramos dijo que entre las personas de mayor riesgos se encuentran también aquellas con una reserva cardíaca disminuida cuyo corazón no puede adaptarse rápidamente a los cambios que se producen en el organismo en condiciones de calor extremo, tal como el aumento de la frecuencia cardíaca.
Además las personas con insuficiencia cardíaca y los niños menores de cuatro años típicamente tienen una reserva cardíaca disminuida. Pueden deshidratarse muy fácilmente, incluso con sólo estar sentados en una casa donde hace demasiado calor o caminar al aire libre cuando hace calor.
Sin embargo el especialista sostiene que hacer ejercicio intenso en condiciones de calor y humedad puede ser difícil e incluso peligroso, pero se puede realizar sin riesgo cuando hace calor si toma las medidas adecuadas.
“Una de las cosas más importantes es mantenerse hidratado y reducir la intensidad del ejercicio cuando hace mucho calor. Mantener hidratado el cuerpo durante el ejercicio ayuda a reponer el agua perdida con el sudor, y evita el cansancio y el desempeño físico deficiente”, precisa.
Afirma que la sed no es el mejor indicador del agua que necesita el cuerpo, porque sentimos sed cuando el cuerpo ya está deshidratado, pero que además ésta típicamente se satisface incluso antes de que se haya repuesto plenamente el volumen de agua del cuerpo, lo implica que hay que beber agua durante el ejercicio aunque no sintamos sed.
En este sentido recomienda vestir ropa holgada que permita que el aire circule pero que lo proteja del sol, evite la exposición directa al sol. Protéjase del sol con un sombrero, antojos de sol y filtros solares y tomar agua fresca en lugar de fría, porque el cuerpo absorbe el agua fresca más rápidamente.
Recomienda no tomar jugos ni gaseosas durante el ejercicio, porque estas bebidas contienen más de un 10% de carbohidratos (azúcar) y no se absorben bien durante el ejercicio, pero puede beber bebidas deportivas porque típicamente contienen menos de un 8% de carbohidratos, pero si toma demasiadas podría ingerir demasiadas calorías.
Ramos reitera que el agotamiento por calor se produce en personas que están expuestas a altas temperaturas y no beben suficientes líquidos, las de mayor riesgo de sufrir un agotamiento por calor son los ancianos, los niños, la gente con presión arterial alta y los que trabajan o hacen ejercicio en ambientes calurosos.
En el agotamiento por calor, el cuerpo puede mantener una temperatura normal por un tiempo, pero sólo en detrimento de otras funciones del organismo.
Los síntomas del agotamiento por calor incluyen:
Sudoración excesiva, Palidez, Calambres musculares, Lengua seca y sed, Cansancio, Debilidad, Mareo, Dolor de cabeza, Náuseas o vómitos, Desmayo
Las personas que tengan estos síntomas o problemas cardíacos deben consultar al médico inmediatamente. Si ve que alguien comienza a tener síntomas de agotamiento por calor, retírarlo inmediatamente del sol y llévelo a un lugar fresco, quitarle las capas de ropa que no necesite y darle agua o una bebida deportiva para reponer los líquidos que el cuerpo perdió. Si la persona no se siente mejor dentro de una hora, solicite atención médica.