El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, declaró en una entrevista con la cadena de televisión española La Sexta, difundida este domingo, que “seguirá mandando un bolivariano” en su país en 2019, tras las elecciones presidenciales.
Respondiendo al periodista Jordi Évole, Maduro también tuvo que dar explicaciones sobre la hiperinflación rampante que golpea al país.
La entrevista se dio en un contexto de país –muy dependiente de los ingresos del petróleo– que padece escasez, principalmente de alimentos y medicamentos, una hiperinflación y una amenaza de default.
En este sentido, Évole le preguntó a Maduro “¿qué le pasa por la cabeza cuando ve que un venezolano tiene que pagar pañales con una bolsa llena de billetes?”. El periodista fue más allá y le dijo que una bolsa de pañales sale 120 mil bolívares, y para mostrar la cantidad desembolsó frente al mandatario ochos fajos de billetes, necesarios para comprarla.
Maduro respondió que esto es muestra de un “modelo de erra económica” para “derribar a un pueblo”, descartando que se trate de un problema de política interna, como le consultó el periodista. El presidente venezolano explicó además que esto “es parte de la imposición ilegal de un sistema de cambio dominado desde Miami, que fija el precio de la moneda venezolana, y a partir de ahí funciona un sistema que pone los precios de los productos en Venezuela, incluso de aquellos que no tienen componentes importados”.
Al ser preguntado si se presentará como candidato en los comicios, previstos para finales de 2018, Maduro, en el poder desde 2013, dijo que eso lo tendrá que decidir el “movimiento bolivariano venezolano”.
“Ni me ofrezco ni me niego (…) Lo que sí te puedo decir es que aquí, en el palacio de Miraflores, seguirá mandando un bolivariano. Eso sí te lo puedo asegurar”, declaró.
El sucesor del presidente Hugo Chávez (1999-2003) también afirmó que no había presos políticos en Venezuela, al contrario de lo que aseguran varios países, incluido España.
De los opositores encarcelados, “ninguno está preso por haber sido líder político, por haber promovido una idea, sino porque violaron las leyes“, aseguró Maduro.
Según la ONG Foro Penal Venezolano, hay 353 presos políticos en Venezuela. Maduro puso en duda la credibilidad de esa organización, afirmando que estaba dirigida por “delincuentes” y “financiada por organismos de inteligencia de los Estados Unidos”.
Respecto al caso de Leopoldo López, opositor emblemático al poder chavista detenido a principios de 2014 y actualmente en prisión domiciliaria en Caracas, el presidente venezolano afirmó “lamentar” esta situación, pero aseguró que quiere que “pague con las leyes de Venezuela los crímenes que cometió”.
Fue condenado a casi 14 años de cárcel, acusado de haber incitado a la violencia durante unas manifestaciones antigubernamentales que dejaron 43 muertos, en 2014.
“Lamento verdaderamente que su palabra empeñada (…) en respetar los mecanismos democráticos no lo haya hecho. Y que haya provocado 43 muertos, haya provocado más de 900 heridos (…) y haya intentado públicamente (…) durante 6 meses del año 2014, derrocar el gobierno legítimo”, declaró Maduro.
Venezuela está sumida desde hace varios meses en una grave crisis política. Las manifestaciones antigubernamentales de primavera dejaron 125 muertos y la oposición denuncia una “dictadura”.