Una joven de 34 años murió tras someterse a una cirugía plástica en busca de mejorar el aspecto físico de su cuerpo.
Claribel Abreu Moreno fue declarada muerta la tarde del viernes, en el Centro Médico Padre Fantino, La Vega, donde fue intervenida.
La joven residía en la calle Santa Rosa, del barrio Buenos Aires, en el distrito municipal Maimón de Bonao y era propietaria de un salón de belleza. Dejó dos niñas en la orfandad.
Una fuente cercana a la familia informó que se presume que la occisa tenía varios días muerta en el centro de salud, pero que la habrían mantenido conectada a los aparatos médicos.