El reconocido entrenador de béisbol Ruddy Santín murió este domingo a causa de un infarto, confirmó a Diario Libre su colega y presidente de la International Prospect Legue, Amaury Nina.
Al momento de su muerte, Santín residía en Santo Domingo Este.
Santín, de 60 años, nació en Cuba en 1960 y su familia se mudó cuando él tenía menos de un año a Estados Unidos. Trabajó como escucha de Grandes Ligas por más de 30 años para Yanquis, Rays y Gigantes, considerado como uno de los ojos más privilegiados para detectar talento a temprana edad.
Nina reveló que Santín se había sometido recientemente a una operación de corazón.
“Fue un luchador de nosotros, Ruddy era para mí el mejor entrenador que tenía el béisbol. Fue un padre para nosotros, siempre estaba luchando por el bienestar de los niños, sobre todo para que se dejara de firmar esos muchachos tan temprano como a los 13 años”, dijo Nina.
Una lucha que reiteró en una conversación con Diario Libre, el pasado mes de abril.
“Eso de apalabreo se tiene que acabar, les está haciendo daño a los peloteros. Ellos (MLB) lo saben. Ya (los equipos) lo están haciendo para el año que viene, es que se sobrepasan de dinero (comprometido con relación al que tendrán disponible)”, dijo entonces Santín.
Como escucha, Santín firmó a jugadores como D’Angelo Jiménez y Cristian Guzmán. Pero hace una década renunció a sus labores con los Gigantes para abrir su academia, MVP, y trabajar de forma independiente en el desarrollo de atletas.
De ella han salido jugadores como Rafael Devers, Wander Franco, Yunior Severino, Freudis Nova, Orelvis Martínez, Ismael Mena, todos receptores de bonos de seis y siete dígitos a la hora de firmar.
