“Soy un mezquino, un sucio, un forajido y, además, bantante malo”. Con esta frase se autodefinía Charles Manson, uno de los criminales más conocidos de nuestra historia reciente, que ha fallecido hoy a los 83 años. Culpable intelectual del asesinato de la actriz Sharon Tate -que por entonces, en 1969, era la mujer deRoman Polanski y se encontraba embarazada de ocho meses- entre otros crímenes, Manson pasó a ser la viva imagen de la violencia, la locura y lo macabro en EEUU.
Nacido en 1934 en Cincinnati, Manson tuvo la mala fortuna de nacer en la familia equivocada. Su madre, por entonces con 16 años, se vio obligada a criar a su hijo sola, después de que su novio decidiera abandonarla tras conocer su embarazo. Joven, sola y sin ayuda económica, no dudó en cometer todo tipo de delitos para conseguir dinero, lo que la llevó en múltiples ocasiones a dar con sus huesos en la cárcel. El pequeño Charles se crió entre visita y visita a la prisión.
Su traumática infancia le llevó a aprender por imitación y, con poco más de 12 años, comenzó a llevar a cabo sus primeros delitos: robos, atracos, sustracción de coches… Pronto se convirtió en carne de reformatorio, donde años después confesaría que había sido violado de manera sistemática. Tanto sufrimiento provocó un cóctel peligroso para Manson, que terminó por convertirse en incontrolable tras entrar con poco menos de 19 años en la cárcel, donde se convirtió en un conocido proxeneta.
Preso durante varios años -en los que se sucedieron los intentos de fuga-, Manson encontró su sitio entre los conceptos que realmente le apasionaban: la filosofía oriental, el esoterismo, las drogas y la música de los Beatles, un cóctel que provocó que creara su propia composición de la realidad. Tras salir de la cárcel en 1967, y en plena oleada ‘hippie’ donde ir contracorriente y apasionarse por la cultura subversiva eran la norma a seguir, Manson creó un caldo de cultivo enfermizo.
Tras salir de prisión, decidió mudarse a San Francisco, donde pronto empezó a tener seguidores por su forma de vida. Así creó ‘La Familia‘, ese grupo de adeptos que creían ciegamente en su modo de vida. Fue cuestión de meses que se trasladaran a Los Angeles, donde comenzaron sus conexiones con Hollywood. ¿Cómo? Denis Wilson, baterista de los Beach Boys y colaborador de ‘La Familia’, se encargó de presentarle grandes personalidades que le hicieron famoso en la farándula.
Fue entonces cuando los Beatles publicaron el conocido ‘Álbum Blanco’, en el que se encontraba la canción ‘Helter Skelter’. Manson reinterpretó este tema de modo críptico; en su opinión, la canción contaba la historia de una guerra racial entre blancos y negros que estaba a punto de llegar. Asumió como real esta versión enloquecida de la canción de los cuatro de Liverpool y la tomó como lema propio para dar lugar a esta catástrofe, que creía que se desencadenaría con sus actos.
Asesinatos promovidos por Manson
Manson conminó a ‘La Familia’ a comenzar su particular ‘Helter Skelter’ que desencadenaría la guerra que estaba por venir. Fue entonces cuando llegó el fatídico 8 de agosto de 1969:Tex Watson, Susan Atkins, Linda Kasabian y Patricia Krenwinkel acudieron al 10050 de Cielo Drive, en California, con la orden de destruir lo que encontraran. Manson creía que ahí vivía Terry Melcher, un productor musical amigo de Wilson, que no acudió a su casa para valorar varias composiciones que él había realizado, entre ellas, una versión de la canción de los Beatles -posteriormnte, publicaría dos álbumes con estas canciones, ‘Lie’ y, como no, ‘Helter Skelter’-.
Sin embargo, Melcher había dejado aquel piso hacía algunos años y los nuevos inquilinos eran Roman Polanski y Sharon Tate. El director se encontraba en Londres cuando los cuatro asesinos irrumpieron en su casa, donde mataron a sangre fría a su esposa embarazada de ocho meses, al peluquero de estrellas Jay Sebring, al guionista Wojciech Frykowski y a su novia Abigail Folger. Con la sangre de Tate, pintaron en la puerta de la casa la palabra ‘Pig‘ (‘cerdo’).
Un día después, estos cuatro miembros de ‘La Familia’ acompañados por Leslie van Houten y Steve Grogan, acudieron a otra casa cercana, donde mataron a cuchilladas al matrimonio LaBianca, escribiendo sobre el pecho del marido la palabra ‘War‘ (‘guerra’). Atkins, presente en ambas escenas del crimen -y culpable de algún que otro asesinato en nombre de ‘La Familia’- fue detenida como sospechosa, y terminaría por delatar a Manson de ser el instigador de los asesinatos.
La justicia declaró a Charles Manson culpable de conspiración de la muerte de las siete personas de ambos crímenes, por lo que fue sentenciado a muerte. Sin embargo, la pena sería automáticamente conmutada por cadena perpetua tras eliminarse este castigo en California en 1972. Desde entonces, Manson ha pasado toda su vida en prisión, hasta que hace algunos días se vio obligado a ser atendido en un hospital de Bakersfield de sus dolencias físicas.
Condenado a cadena perpetua, Manson ha encontrado la muerte a los 83 años. Incapaz de superar su importante deterioro físico, el considerado como uno de los grandes asesinos de nuestra época ya es historia. Capaz de convertir a toda una secta de ‘hippies’ en losasesinos más violentos que haya conocido nunca norteamerica, Manson se ha encontrado con la muerte de frente, la única capaz de juzgar sus atroces crímenes al ritmo del ‘Helter Skelter’ de los Beatles.