El obispo de la Diócesis de San Pedro de Macorís, monseñor Santiago Rodríguez, afirmó en esta ciudad de Santiago que la preservación de la paz, el orden y la seguridad ciudadana es una labor que nos corresponde a todos como nación porque no es una tarea exclusiva de la Policía Nacional.
Monseñor Santiago Rodríguez hizo la observación al presidir una eucaristía en la mañana del lunes en la Catedral Santiago Apóstol, con motivo de San Judas Tadeo, Patrón de la Policía Nacional.
El acto religioso estuvo encabezado por el general Juan Bautista Jiménez Reinoso, director Regional Cibao Central de la Policía Nacional; quien estuvo acompañado de su esposa Adry Oscarina Peguero de Jiménez, de Rosa Santos, gobernadora provincial de Santiago; Ángela Jáquez, viceministra de Interior y Policía; Carlos Manuel Estrella, miembro de la Comisión de Reforma Policial; Andrés Cueto, administrador de Edenorte, general Reynoso Green, de comando del Conjunto Norte de las Fuerzas Armadas; entre otras autoridades civiles, policiales y militares,
Pido al Señor-imploró el prelado católico- que siga iluminando a nuestras autoridades y que verdaderamente ustedes puedan seguir siendo los hombres y mujeres que abrazan, con esmero, con entrega y esfuerzo, lo más sagrado de una nación, que es su soberanía, que es su libertad y que es también su confianza de poder estar como verdaderamente ciudadanos de un pueblo, de una nación.
¿Qué sería de un pueblo sin policías durante dos horas? Se preguntó, para luego expresar que el caos y el desorden se constituirían en nuestra sociedad.
Dijo que ante los desórdenes, nosotros debemos ser promotores del orden, ante las divisiones o ante las cosas que realmente dañan la integridad social, ser ente de integridad y de soluciones de conflictos y problemas.