Un nuevo episodio de las manifestaciones a partir de la masacre de los 43 estudiantes de Iguala, ha terminado hoy con el incendio de la sede del PRI, el partido oficialista.
Ocurrió en el estado de Guerrero, minutos antes de que los manifestantes protagonizaran un nuevo enfrentamiento con la policía, que terminó con el saldo de 5 heridos.
El incendio se produjo durante marcha rodeada de tensión, de la que participaron un millar de maestros sindicalizados y estudiantes provistos de piedras y palos en la ciudad de Chilpancingo, capital de Guerrero, a 275 km de Ciudad de México.
La subsecretaría de Protección Civil estatal informó de al menos cinco heridos en la protesta por impactos de piedra, tres de ellos policías y dos periodistas. Uno de los reporteros lesionados es colaborador de la AFP.
Maestros integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) y estudiantes de escuelas rurales de magisterio, que en su mayoría iban con el rostro tapado, se enfrentaron con los policías antimotines que los persiguieron por las calles.
Durante la marcha se arrojaron cócteles molotov contra la sede del Partido Revolucionario Institucional (PRI), del presidente Enrique Peña Nieto.
“Cerca de 400 personas lograron apoderarse del edificio del PRI y de algunos trabajadores, que luego dejaron en libertad“, dijo Cuauhtémoc Salgado, dirigente estatal de ese partido político, en declaraciones a Milenio Televisión.
La marcha forma parte de la ola de protestas para exigir al gobierno que encuentre a los 43 estudiantes desaparecidos el 26 de septiembre en Iguala, cuando fueron atacados por policías e integrantes del cártel local Guerre
La fiscalía anunció el viernes pasado que, según confesiones de detenidos, los jóvenes –capturados por policías corruptos de Iguala que los habrían entregado a sicarios del narcotráfico– fueron asesinados y sus cuerpos quemados y después arrojados al río.
Pero las familias y compañeros no creen en esa versión y exigen intensificar la búsqueda.
Está previsto que familias de las víctimas se reúnan en la tarde del martes en Chilpancingo con Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, y Jesús Murillo Karam, fiscal general, para conocer avances de la investigación, informaron a la AFP voceros de esos organismos.
Los familiares quieren solicitar la colaboración de estados Unidos en la búsqueda de sus hijos desaparecidos.