SANTIAGO. Las operaciones comerciales del mercado de pulgas de esta ciudad en sus nuevas instalaciones del kilómetro cuatro y medio de la autopista Joaquín Balaguer, se iniciaron ayer formalmente, con varias quejas de algunos dueños de puestos por el precio de los mismos.
No obstante, Luis Alberto Jiménez (Bozo), presidente de la Asociación de Pulgueros de Santiago y administrador del mercado, declaró que RD$15,000 es una suma razonable para los dueños de los puestos de ventas.
“Esa cantidad de dinero no es mucha, si se toma en cuenta que es un contrato a 20 años y, además, los inversionistas de este negocio no van a regalar su dinero, los dominicanos están muy mal acostumbrados y quieren que siempre les regalen”, subrayó Jiménez en declaraciones para Diario Libre.
Precisó que en los nuevos espacios, ubicados en unos 28,493 metros cuadrados, los medianos y pequeños comerciantes dispondrán de amplias facilidades, entre ellas seguridad, baños, comedor y sobre todo que nadie vendrá a sacarlos porque obstaculizan vías públicas. Indicó que en principio los comerciantes deben comprender que tienen que hacer algunos sacrificios.
Entre las propietarios de puestos que se quejaron están Carlos Aquino, Miguel Tavárez y Joaquín Saldaña, quienes dijeron que vienen de Santo Domingo, y como las ventas estuvieron bajas, no iban a sacar ni siquiera el dinero del transporte.
En cambio, varios comerciantes consultados declararon que para el inicio del mercado las ventas estaban aceptables.
Roberto Cruz, Arisleyda Altagracia Reynoso, Rigoberto Cabrera y la ciudadana haitiana Lucía de la Rosa, dijeron que después que los compradores se acostumbren al nuevo mercado, las ventas mejorarán sustancialmente.